El juez cita a dos testigos protegidos al levantar parcialmente el secreto de los atentados del 17-A

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J. G. Albalat / Ángeles Vázquez

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Apenas 18 días antes del primer aniversario de los atentados de Barcelona y Cambrils, el 17 y 18 de agosto del año pasado, el juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu ha procedido a levantar parcialmente el secreto del sumario. Considera que debido al tiempo transcurrido "no se va a perjudicar el resultado de las investigaciones". El auto que precisa qué se puede conocer y qué no, para no frustrar la investigación aún pendiente, aporta una importante novedad: la causa cuenta con dos testigos protegidos, el A3 y el A1, que declararán ante el magistrado el próximo 6 de agosto.

Es la primera resolución que se conoce del Juzgado Central de Instrucción número 4 desde que en septiembre envió a prisión a prisión a Said Ben IazzaSaid Ben Iazza, detenido en Vinaròs, por colaboración con la célula terrorista que cometió los atentados, en los que murieron 16 personas y más de un centenar resultaron heridas. En agosto había encarcelado a dos de los cuatro detenidos que se produjeron tras los atentados. La mayoría de los terroristas había muerto mientras fabricaban el explosivo conocido como madre de Satán en el chalé de Alcanar o fueron abatidos por los Mossos en Cambrils. El conductor de la furgoneta que mató a 13 personas en la Rambla, Younes Abouyaaqoub, lo fue en Subirats.

El magistrado mantiene la reserva sobre cuatro piezas de la causa, porque aún hay "diligencias instructoras" pendientes, al haber resultado "la labor instructora compleja y extensa" y, de conocerse, poder "hacer estéril toda la actuación sumarial seguida". Son las referidas a los testigos protegidos; a las entradas y registros realizadas en Ripoll y otras localidades; a las comunicaciones telefónicas mantenidas entre los autores de los atentados, para la que ha sido necesario acudir hasta a Alemania en busca de ayuda para desbloquear los terminales, y la que alberga las comisiones rogatorias remitidas a otros países para determinar las conexiones internacionales de los terroristas.

21 tomos y vídeos secretos

El secreto se ha levantado sobre la pieza principal de la causa, que cuenta con 21 tomos, que ya están digitalizados. También se ha retirado la reserva de las piezas abiertas por las víctimas que resultaron lesionadas y fallecidas, a cuyos familiares se ha hecho el correspondiente ofrecimiento de acciones; los investigados fallecidos; los daños materiales causados; las personaciones de distintas acusaciones, y las relativas a notificaciones, situación personal de los imputados y para averiguar su patrimonio. Estas aún no están digitalizadas, por lo que los abogados deberán consultarlas en el juzgado.

También tendrán que personarse en la Audiencia Nacional quienes quieran consultar los dos dispositivos de vídeo que el magistrado ha dejado a su disposición en el juzgado para su visualización allí "con expresa prohibición de realizar ningún tipo de copia de los mismos" para evitar "una posible difusión externa al procedimiento". Uno de ellos es de uno de los terroristas manipulando explosivos y el otro, del atropello de la Rambla. Este contiene imágenes del momento en el que la furgoneta con matrícula 7086 JWD se subió al paseo central y se llevó por delante a todo el que pudo y también recoge filmaciones de justo antes y después del atentado. 

El magistrado ha dictado, además, una providencia para declarar "vacíos de contenido" la media docena de recursos presentados por las partes para instar el levantamiento del secreto que se había venido prolongando mes a mes, la última vez el 20 de julio, desde que se cometieron los atentados.