LA SUCESIÓN DE RAJOY

Pablo Casado gana fuerza en el PPC

Pablo Casado, ayer, en la sede del PP.

Pablo Casado, ayer, en la sede del PP.

Júlia Regué

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La pugna interna para suceder a Mariano Rajoy ya ha arraigado en Catalunya, propiciando la polarización de los líderes catalanes entre tres de los seis aspirantes. El tándem María Dolores de Cospedal-Soraya Sáenz de Santamaría pierde fuelle, y la tercera vía liderada por Pablo Casado arraiga en el territorio.

Tres de los presidentes provinciales del partido, Daniel Serrano (Barcelona), Alejandro Fernández (Tarragona) y Marisa Xandri (Lleida), ya han tomado partido. Y lo han hecho por el que fuera hasta hace pocos días vicesecretario de comunicación del PP.

Casado, que según él reunió unos 5.000 avales para postularse, también debutó en Catalunya. Fuentes populares indican que fue el primero en el pódium, seguido por Cospedal y, en última posición, Santamaría. "Ganó ampliamente y tiene posibilidades de ganar no solo en Catalunya sino a nivel nacional", afirman las mismas voces. Aun así, el recuento de avales por comunidades no ha sido desgranado y algunos aspirantes han preferido esconderlos mientras otros lo han difundido sin la certificación del partido que pueda confirmarlos.

"Su talante y juventud hacen que desprenda aires de renovación", reivindican algunos de sus seguidores del PPC. La polémica del máster en la Universidad Rey Juan Carlos y la propaganda que hizo llegar a algunos afiliados días antes del inicio oficial de la campaña no le han enturbiado. Al contrario. Estas controversias se leen por los afiliados catalanes como una "estrategia" programada para desbancarle, un "ataque" para que otro candidato saque ventaja y lo adelante en la carrera.

Cospedal y Santamaría son conscientes de que abrir fuego entre ellas allanaría el camino al candidato. Así que el conflicto catalán no debe centrar el debate en las primarias. La primera culpa a la exvicepresidenta del fracaso de la llamada 'operación diálogo' y la segunda le reprocha su incondicional apoyo a Xavier García Albiol cuando se olían una debacle electoral que se certificó en las urnas el 21 de diciembre.

Entretanto, Casado gana puntos como garante de la unidad y se presenta como la "única garantía para que el PP no se rompa". Este sábado previsiblemente tendrá la oportunidad de explicarse en un acto en Barcelona.

Neutralidad en la cúpula

Albiol, el presidente del partido en Catalunya, y el secretario general, Santi Rodríguez, las dos máximas figuras del PPC, mantendrán su neutralidad hasta el 5 de julio, el día en el que se desvelarán los dos candidatos que oficializarán la pugna final por la presidencia.

Fuentes del partido insisten en que ambos intentarán recibir con los brazos abiertos a todos los candidatos que presenten su postulación en Catalunya, siempre que su agenda se lo permita, y que no se desmarcarán del papel "institucional" que les atañe.

A Albiol se le solía encajar dentro del cospedalismo, aunque si Casado pasa a la segunda vuelta puede hacer un viraje en su tradicional preferencia.

Comunidad dividida

Pese a todo, Catalunya sigue siendo una de las comunidades autónomas más divididas. La exministra Dolors Montserrat fue una de las primeras en pronunciarse y anunció que dirigiría la campaña de Cospedal como portavoz. La expresidenta del PPC Alicia Sánchez-Camacho también se ha posicionado junto a ella y, hasta el momento, el exdelegado del Gobierno y presidente del PPC de Girona Enric Millo se mantiene fiel a Santamaría.

Desde el PPC aseguran que 1.762 afiliados catalanes tienen derecho a votar, según los datos provisionales: 1.238 figuran en las listas de Barcelona, 233 en Tarragona, 184 en Lleida y 107 en Girona. Lo harán en un total de 30 mesas electorales, 23 de ellas en la capital catalana.