BOICOT EN LA UB

Jean Canavaggio: "No esperaba encontrarme golpes, silbidos e insultos"

Suspendido un acto de Societat Civil Catalana en la UB por las protestas de un grupo de estudiantes

Suspendido un acto de Societat Civil Catalana en la UB por las protestas de un grupo de estudiantes / ALEIX FREIXAS

Júlia Albacar

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“Una cosa es no querer facilitar las instalaciones de la universidad, pero no me esperaba encontrar con un rechazo a base de golpes, silbidos e insultos”, ha explicado a EL PERIÓDICO el hispanista francés Jean Canavaggio, que asistió el jueves al acto organizado por Societat Civil Catalana en la Universitat de Barcelona y que fue boicoteado por estudiantes y activistas independentistas.

Canavaggio, de 81 años y uno de los mayores expertos sobre Miguel de Cervantes, ha lamentado el incidente, y ha asegurado que “el acto era totalmente académico, no tenía trascendencia política”, a lo que ha añadido que “era una conmemoración de un genio como Cervantes, se podía tratar de forma totalmente desapasionada y sin nacionalismos”.

La celebración, a la que también asistía el presidente de SCC, José Rosiñol, fue suspendida poco después de su inicio por las protestas de medio centenar de personas, y que fueron en aumento hasta desembocar en enfrentamientos verbales y algún intercambio de golpes. “Al empezar el acto ya oímos los gritos y silbidos en el patio, pero luego, mientras presentaban mi carrera, el ruido fue en aumento hasta que fue imposible proseguir”, ha explicado Canavaggio, que ha asegurado que una protesta de este calibre es “arbitraria y totalitaria”.

200 asistentes evacuados

Los 200 asistentes al acto fueron evacuados de la Aula Magna donde se encontraban mientras eran abucheados por la multitud, “en un ambiente muy, muy tenso, aunque los manifestantes se mantuvieron a cierta distancia de nosotros y pudimos salir bien” ha detallado Canavaggio.

Las protestas contra el acto de SCC fueron convocadas por las asambleas de la UB y organizaciones como los sindicatos de COSSEPCArran y la CUP, bajo los lemas “en la UB no pasarán” y “fuera fascistas de la universidad”. “Estaba preocupado por carteles que anunciaban que había supuestamente un acto “franquista”, pero esperaba encontrar una controversia correcta” ha asegurado Canavaggio, y ha concluido que, al fin y al cabo, “Cervantes fue un gran admirador de Barcelona”.