CRUZ POLÉMICA

La 'resurreción' luminosa de la polémica Cruz de los Caídos de Callosa

Proyección de la Cruz de los Caídos de Callosa.

Proyección de la Cruz de los Caídos de Callosa. / periodico

Nacho Herrero

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Cada tarde sobre las 19.30 horas, cuando se pone el sol y ya empieza a refrescar en Callosa de Segura, la octogenaria Tere Agulló vuelve a su casa en la plaza mayor de este pueblo alicantino y enciende un proyector. Pero no lo enfoca a su pared sino justo a la de enfrente de su balcón, a la de la fachada de la Iglesia de San Martín, y lo que reproduce es una proyección a tamaño real de la Cruz de los Caídos, que fue retirada hace unas semanas de ese mismo lugar en virtud de un acuerdo del ayuntamiento de esta localidad para cumplir con la ley de la memoria histórica.

La secuencia diaria se completa un rato después, cuando un agente de la policía municipal se acerca a su portal, toca el telefonillo y le entrega una multa de 100 euros, pues está prohibido por las ordenanzas municipales realizar proyecciones en la vía pública sin permiso. Tampoco tenía permiso la concentración de un centenar de personas que se congregaron el 10 de marzo para asistir a lo que la Plataforma en Defensa de la Cruz anunció como la "resurrección" del monumento. Ni Agulló, ni la plataforma en su nombre han pagado ninguna de las sanciones, aunque se ha impulsado una campaña para detener lo que se aseguran es un "acoso" por parte del consistorio.

Este nuevo 'pulso' arrancó pocos días después de que finalizaran los trabajos de retirada del monumento. Tras tres intentos fallidos por la presión de los partidarios de la permanencia del monumento, el ayuntamiento los inició el pasado 29 de eneroLo hizo de madrugada, amparado por un fuerte dispositivo de seguridad que incluyó la detención de dos militantes de la Falange, y con suspense pues el TSJCV ordenó durante unas horas paralizar unos trabajos que finalmente permitió acabar. La cruz y el pedestal se encuentran ahora en el almacén de un museo municipal.

Segunda reaparición

Esta reaparición luminosa es la segunda que se produce pues ya antes apareció en la plaza una cruz de madera de grandes dimensiones y ha coincidido con la aparición de algunas pintadas con la silueta del polémico monumento en las casas particulares de algunos de los concejales del tripartito de izquierdas que gobierna el consistorio y que ha impulsado una retirada que aún tiene varios frentes abiertos en los juzgados.

La cruz fue instalada en 1942 y sufragada por varios miembros de la Falange. De hecho, además de los nombres de 81 personas del bando franquista que murieron en diferentes circunstancias en la Guerra Civil, incluía una exaltación explícita de José Antonio Primo de Rivera, al que se le realizaron varios homenajes en este escenario. El sacerdote de la Iglesia de San Martín retiró las placas con los nombres de los homenajeados para tratar de sortear su retirada pero no lo logró. Ahora, una octogenaria ha encendido su recuerdo.