La justicia alemana pone en duda también el delito de malversación contra Puigdemont

El tribunal de Schleswig-Holstein considera que en la euroorden remitida por el juez Llarena falta concreción

Puigdemont, con la portavoz de JxCat, Elsa Artadi,tras una rueda de prensa ayer en Berlín.

Puigdemont, con la portavoz de JxCat, Elsa Artadi,tras una rueda de prensa ayer en Berlín.

El Periódico

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Después de desmontar la acusación de rebelión contra Carles Puigdemontla Audiencia Territorial de Schleswig-Holstein pone ahora en duda que se pueda acusar al expresidente de la Generalitat de malversación. El tribunal alemán ha pedido a la justicia española que envíe información adicional sobre la denuncia al considerar que en la euroorden falta concreción.

"No contiene una descripción suficiente de las circunstancias en las que se produjo el delito con la necesaria concreción de la acusación que permita asociarlo de manera suficiente a los hechos que se le imputan", subraya la Audiencia germana en el auto emitido el pasado viernes y difundido este lunes. Los jueces reconocen que Puigdemont fue "corresponsable", al menos políticamente, de la generación de los costes del referéndum por un valor aproximado de 1,6 millones de euros, y que su Govern no estaba autorizado a gastarlos tras la prohibición del Tribunal Constitucional. Pero ponen en cuestión si el mero hecho de contraer las obligaciones financieras asociadas al referéndum sin que se hayan realizado pagos efectivos constituiría un acto punible.

La Audiencia Territorial de Schleswig-Holstein descartó la extradición de Puigdemont por un delito de rebelión. En su auto, el tribunal determinó que los argumentos de Llarena para acusar de rebelión al líder de Junts per Catalunya son "inadmisibles" y que casaban mal con el código penal alemán. "A diferencia de cómo pudiera verlo el derecho español, en Alemania, la fuerza de la masa que se deriva de una gran reunión de personas no sería suficiente para alcanzar el nivel de violencia que requiere el artículo 81 del código penal".

"La violencia que tuvo lugar el día de la consulta es atribuible al acusado como el iniciador y el defensor del referéndum", reflexionan los magistrados. Pero consideran que los hechos "en cuanto a su naturaleza, magnitud y efecto no fueron más significativos" que las protestas que tuvieron lugar en 1983 en Frankfurt contra la ampliación del aeropuerto Startbahn West. "Los actos no habrían sido suficientes, como muestra la historia para ejercer la suficiente presión en el Gobierno para forzarle a capitular a las demandas de los violentos".

El 'expresident' deberá presentarse una vez por semana ante la Policía de Berlín para cumplir las condiciones impuestas por la Audiencia Territorial mientras se estudia la petición de extradición a España.