El control de la comunicación del Govern enquista el pacto JxCat-ERC

Hay flecos y flecos. Por no hablar de flequillos. En toda negociación, encarrilado el grueso del acuerdo siempre quedan aquellos aspectos que, a primera vista, parecen menos importantes. Muchas veces son, efectivamente, aspectos muy colaterales. Otros son bien estructurales. Como los que tienen ahora mismo encima de la mesa Junts per Catalunya y ERC. "Estamos a la vez muy cerca y muy lejos", describía una fuente conocedora de la negociación el estado de la cuestión. El desencuentro se halla en la comunicación del Govern, en el sentido más amplio. El control sobre los medios de comunicación propios, de las subvenciones a privados y de las campañas propagandísticas que todo Ejecutivo diseña.

Lo encarrilado, que no cerrado, sitúa en 14 las 'conselleries' del nuevo Ejecutivo. Una presidencia honorífica, la de Carles Puigdemont. Otra para ruborizar al Estado, que todo apunta que podría ser para el encarcelado Jordi Sànchez, siempre que se permita su traslado desde el Centro Penitenciario Madrid V al Parlament. Y una vicepresidencia, para ERC. Se va a seguir trabajando este fin de semana y algunos vaticinan el desenlace en forma de acuerdo para el lunes.

Pero donde está encallando el diálogo es en el debate sobre quién controla y dirige la comunicación del Govern. Por ejemplo, la Corporació Catalana de Mitjans Audiovisuals, el organismo del que penden TV-3 y Catalunya Ràdio. En la anterior legislatura fue la parte convergente de Junts pel Sí la que mantuvo la dirección del ente, que en la práctica supone controlar las directrices tanto de la tele como de la radio pública, por mucho que los republicanos se hicieran con Catalunya Ràdio.

Aprendida la lección y como este Govern tiene que ser al 50%, en virtud de la igualdad de votos entre unos y otros (apenas 12.000 a favor de los de Puigdemont), los republicanos negocian el control de la 'Corpo' como si fuera una 'conselleria' más. Y de las más importantes.

Esquerra quiere más peso

Hasta ahora, las competencias en comunicación del Govern se repartían a partes iguales entre JxCat y ERC. Se trata de un esquema que se ha reproducido en todos los ámbitos: el pacto consistía en que cada partido gestionaba sus áreas casi independientemente. Sin embargo, según las fuentes consultadas, los republicanos quieren ahora un mayor peso.

Y esas desavenencias provocaron en gran parte la interrupción de las negociaciones del pasado jueves. El foco está puesto en las direcciones generales -seis en total- que se ocupan del ámbito comunicativo: tanto en quién las dirige como en si siguen dentro de las competencias del Departament de Presidència, que ostentará con toda seguridad un posconvergente. También la figura de portavoz del Govern está en disputa, y podría acabar recayendo en una persona elegida por ERC. 

Las conversaciones se retomaron este viernes con una reunión a tres, donde la tercera parte en discordia -la CUP, cuyos cuatro diputados son fundamentales para la mayoría independentista- apremió a JxCat y ERC a que "concreten" cuanto antes un acuerdo para afrontar la investidura.

Pleno, el jueves

En cualquier caso, la tensión sigue presente. Estaba previsto que Junts per Catalunya y ERC presentaran una propuesta de resolución conjunta para reivindicar la legitimidad de Puigdemont y del Govern depuesto, pero el choque entre los independentistas ha provocado que no haya acuerdo sobre el texto y que JxCat haya decidido presentar el texto en solitario. La propuesta de resolución se debatirá en el primer pleno de la legislatura, convocado para el próximo jueves.

En el documento, afirma que el 'expresident' "sigue contando con la mayoría parlamentaria suficiente, surgida de las urnas y revalidada el 21 de diciembre, para poderle ratificar la confianza como 'president'". El portavoz adjunto de JxCat, Eduard Pujol, insistió en que Puigdemont "sigue siendo el candidato" de la formación.

Desde ERC subrayan que este tipo de iniciativas "unilaterales" (no la suscribe tampoco la CUP) de los 'puigdemontistas' "no ayudan". "Catalunya precisa de un acuerdo global, y no iniciativas aisladas", ha ponderado antes de la reunión parlamentaria una fuente de ERC. Y ya puestos a señalar puntos de discordia, cabe decir que, según Esquerra, han conocido el contenido de la propuesta de resolución apenas minutos antes de que se presentara.