Toni Castejón: "El dispositivo de los Mossos no estaba preparado para impedir el 1-O"

-Los atentados en La Rambla el 17 de agosto, el referéndum por la independencia el 1-O, la aplicación del artículo 155… son tiempos convulsos para los Mossos d’Esquadra. ¿Han hecho mella en el ánimo de los policías? Los agentes están tocados. Este cuerpo policial es como la sociedad catalana. Porque los Mossos son tu hijo o tu vecino. Hay muchos agentes independentistas. Pero hay otros tantos que no lo son. Los segundos han tenido que estar más callados durante este tiempo. Y, entre los primeros, algunos han tenido comportamientos políticos que los policías no deberían tener.

-¿Un mosso independentista debería ocultar que lo es? Como ciudadano tiene derecho a hacer lo que quiera. Pero no debería hacerlo usando el nombre de Mossos d’Esquadra. Al hacerlo nos usa políticamente a todos, algo que han hecho absolutamente todos los partidos políticos.

-¿Solo os han utilizado los políticos? No. También nos han utilizado casi todos los sindicatos del Cuerpo Nacional de Policía (CNP). Empezó con los atentados del 17-A. Muchos tuvieron un ataque de celos brutal por las felicitaciones internacionales que recibieron los Mossos. Comenzaron a hacer declaraciones que cuestionaban duramente, y sin ningún fundamento, nuestra actuación. Fueron ataques que se recrudecieron con el enredo de la consulta del 1-O. En realidad, la campaña por la equiparación salarial de los agentes españoles con las policías autonómicas, demagógica en algunas reclamaciones, se activó entonces. 

"Algunos sindicatos de la Policía Nacional nos atacaron porque tuvieron un ataque de celos brutal tras las felicitaciones del 17-A"

El 'enredo' del 1-O… Ese día los Mossos, Policía Nacional y la Guardia Civil escribieron, por razones distintas, un día para olvidar.  

-¿Cuáles son estas razones? El dispositivo de los Mossos no estaba preparado para impedir el referéndum. Con los colegios llenos de gente era imposible actuar porque era necesario abrirse paso entre 300 personas. Durante aquella mañana, sobre el terreno, acabó pasando de todo: hubo agentes que intentaron pasar entre la multitud para cumplir el mandato judicial de retirar las urnas. Pero hubo otros que ni siquiera lo intentaron. Y, por su parte, quien ordenó a la Policía Nacional y a la Guardia Civil cargar en aquellas condiciones tendría que haber presentado la dimisión al día siguiente. Además, hubo actuaciones individuales por parte de agentes de estos dos cuerpos que desenterraron la imagen de 'los grises'. ¿Cómo se puede empujar a una mujer por la escalera? Estas imágenes se recordarán durante décadas.

-¿Las heridas entre cuerpos se están cerrando? Es complicado cerrarlas del todo, pero también necesario hacerlo cuanto antes. Se cometieron errores por parte de todos. Por ejemplo, no se debieron permitir los escraches que hubo en hoteles como el de Calella en el que dormían los antidisturbios desplazados desde el resto de España. Pero lo que pasó luego, tampoco puede ser: aquellos gritos de "¡Que nos dejen actuar!" o aquellos antidisturbios que bajaron de sus habitaciones y decidieron actuar por su cuenta… No son actitudes profesionales.  

-También ha habido cosas positivas, los Mossos han recibido durante este periodo mas aplausos que nunca… Hubo dos tipos de aplausos distintos. Uno el que vino después de los atentados de Barcelona y Cambrils. Aquello fue un reconocimiento y una conexión con el ciudadano históricos. Jamás habíamos sentido algo así antes. Pero los aplausos que recibíamos por no haber actuado el día del referéndum el 1-O, sinceramente, hubo muchos policías que no los comprendían. Como tampoco fue fácil encajar los insultos que nos llegaban desde ‘la otra parte’ de Catalunya.

"El artículo 155 se aplicó para llevarse por delante al mayor Trapero" 

-¿Han notado mucho el 155? Aquel artículo se aplicó para llevarse por delante al mayor Trapero. Pero lo cierto es que solo cambió eso. No lo notamos. La falta de efectivos y de material que sufre el cuerpo era anterior a que el Ministerio de Interior tomara el mando. También es verdad que ahora la situación se ha agravado, porque está todo parado y eso significa que nuestras reclamaciones sindicales están más lejos que nunca de atenderse.

-¿Es justa la situación de Trapero? Trapero ha pasado de ser venerado y el policía más famoso a ser completamente apartado de sus funciones y afrontar una pena de cárcel de 15 años por un delito de sedición. Como policía no era justo lo primero ni tampoco lo es lo segundo.