la carrera al 21D

Ciutadans se vuelca en movilizar a los abstencionistas habituales

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Rafa Julve

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La anécdota la explica un diputado de Ciutadans en la anterior legislatura: voluntarios del partido colocaron la semana pasada una carpa informativa en un barrio de Sant Adrià de Besòs. Allí empezaron a acercarse unos cuantos vecinos, algunos para coger papeletas y otros para preguntar cómo y cuándo tenían que votar. Porque había quienes no lo han hecho nunca aunque ya pinten canas, y ese es un perfil de elector al que la candidatura de Inés Arrimadas también ha tratado de movilizar a lo largo de la campaña.

Si realmente aspiran a convertirse en los más votados en las elecciones autonómicas de este jueves (vencer en escaños sería rizar el rizo para ellos), en el cuartel general naranja tienen claro que no les bastará con los votos que supuestamente les irán llegando por decantación procedentes del PPC. Tampoco será suficiente con sumar a estos sufragios los que puedan arañar al PSC con sus apelaciones al "voto útil". Para ganar el 21-D necesitarán activar a los abstencionistas habituales que no se creyeron lo de las 'plebiscitarias' del 2015 pero que, vista la declaración unilateral de independencia (DUI) y los perjuicios económicos de estos últimos meses de 'procés', han decidido ir a las urnas en estos comicios.

Nichos electorales

El equipo de Arrimadas ha peinado estos días numerosas localidades para activar a ese electorado. Un claro ejemplo, el pequeño mitin en la asociación de vecinos Juncària-Bosch de Figueres, en el barrio obrero de una población donde en las anteriores autonómicas la participación fue de las más bajas de Catalunya (69,98%). Con ella o con 'actores secundarios', se han recorrido los nichos electorales de las cuatro demarcaciones, eso sí, con énfasis especial en el área metropolitana de Barcelona.

"Nosotros no vamos a ir a Bruselas a criticar a la UE. Iremos a defender Catalunya en la UE"

Inés Arrimadas

— Candidata de Ciutadans

Una muestra más ha sido el lugar escogido para cerrar la campaña, la plaça Major de Nou Barris. En este distrito de Barcelona ya se impusieron los naranjas en el 2015 con más de 19.000 votos, seguidos de JxSí y PSC, pero aparte de intentar consolidar esa primera plaza, ahora quieren espolear aún más la movilización: hace dos años, con un 72,12%, Nou Barris fue tras Ciutat Vella (61,32%) la zona de la capital donde más baja fue la participación, casi tres puntos por debajo de la media autonómica.

De ahí que Arrimadas haya redoblado en su último mitin los llamamientos a votar ante un millar largo de simpatizantes que han roto a gritar "presidenta, presidenta" cuando un grupo de personas han tratado de rebentar su intervención con una cacerolada. "Hay otros que no quieren que hablemos, pero vamos a hablar muy fuerte en las urnas, tan fuerte que nos va a oír [Carles] Puigdemont desde Bruselas", se ha revuelto ella contra quienes protestaban. "'Votarem, votarem'", le ha seguido el público.

"Esto va a ir de poco"

Aunque hay quienes dudan de si la campaña ha tenido alguna utilidad, las percepciones de los liberales son que esta ha servido para polarizar más el voto. O ERC o C's, algo que también proclaman desde las filas republicanas y que Albert Rivera ha querido exprimir pidiendo votos "prestados" porque "esto va a ir de poco" y hay que concentrar las opciones en una. En el sexto acto que ha compartido con la candidata esta campaña, el líder de C's ha explicado que las encuestas les dan alrededor de "un millón" de papeletas y ha llamado a superar esa cifra.

Mucho más contundente en fondo y forma, pues así se han repartido los papeles, Rivera ha cargado contra "el nacionalismo que lleva gobernando Catalunya desde hace 40 años" y ha aprovechado para asegurar que "hay líderes europeos esperando la victoria de Ciudadanos", una clara afirmación para proyectarse cara a futuros comicios al Congreso. Además, ha llegado a pedir "prestado el voto" porque "esto va a ir de poco" y ha animado a no quedarse en casa a todos los que sintieron tristeza, indignación o vergüenza cuando se proclamó la fallida DUI.