POLÉMICA MUNICIPAL

Los impulsores del acto de Madrid aseguran que buscarán otro espacio

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Pilar Santos / Madrid

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La ciudad de Madrid volvió a tener este miércoles un papel destacado en el tira y afloja institucional y judicial a cuenta del desafío independentista. Por un lado, los organizadores del acto de apoyo al referéndum que querían hacer un acto en el Matadero este domingo (un local del Ayuntamiento que dirige Manuela Carmena) aseguraron que, pese al veto de un juez para que ese espacio municipal se pueda utilizar para ese efecto, celebrará un acto pro 1-O en un lugar que ya anunciarán. Y, por otro lado, la Delegación de la Generalitat festejó la Diada, como todos los años, en la sede que tiene en la calle de Alcalá. Hasta allí se fue el 'conseller' de Presidència, Jordi Turull, que en una breve alocución cargó contra la decisión de investigar a los alcaldes y lamentó que la Generalitat haya ofrecido "políticas" y haya recibido "querellas". 

Carmena confirmó que no habrá ningún acto a favor de la consulta en el Matadero este domingo después de que el juez José Yusty Bastarreche prohibiera el acontecimiento tras un recurso presentado por el grupo municipal del PP, aunque el consistorio presentará alegaciones para dejar claro que está a favor de "la libertad de expresión".

La independencia del juez

Pedro Casas, portavoz de la plataforma convocante, Madrileños por el derecho a decidir, acusó a Yusty Bastarreche de "excederse" y dijo tener "sospechas" de que sea "afín" a los populares. "El recurso del PP se ciñe a que se suspenda un acto administrativo; se pide que se paralice la cesión del local, pero el juez va mucho más allá de lo que los propios demandantes le pedían", se quejó el portavoz. Yusty firmó en el 2014 un manifiesto de la plataforma conservadora Libres e Iguales y que está en contra de la independencia de Catalunya. Pese a todo, los organizadores mantendrán la convocatoria y anunciarán el lugar, los ponentes y todos los detalles "próximamente". 

"Ni renuncia, ni resignación ni rendición"

La Diada madrileña se celebró este año en el jardín de la delegación. Diputados y senadores del PDECat, ERC, PSC y PNV participaron en la fiesta. Ningún miembro del PSOE, el PP o Ciudadanos se acercó a Alcalá pese a estar a 200 metros del Congreso. 

La cantante Lídia Pujol cerró una velada en la que se defendió el derecho a votar la independencia y se volvió a hablar de diálogo pese a la precipitación de los acontecimientos. "Hasta el último minuto ofrecemos diálogo. Que diga día y hora y allí estaremos. Pero no aceptaremos ninguna de las tres 'R': ni renuncia, ni resignación ni rendición", afirmó Turull ante unos 300 invitados y más de 30 medios de comunicación. "Nosotros el diálogo lo ofrecemos, pero por muchas actuaciones que hagan como las de hoy, no va a haber ni renuncia ni resignación ni rendición", proclamó.

El acto incluyó la entrega de premios 'Amic de Blanquerna' a, entre otros, Josep Capella (periodista de TV-3) y la actriz catalana Silvia Marsó.