El PDeCAT de Esplugues aprueba cesar a su jefe de filas en el Ayuntamiento

El concejal Albert Comellas recurre la decisión ante la Comisión para la Calidad Democrática

   El PDeCAT de Esplugues de Llobregat ha aprobado, en una asamblea extraordinaria, cesar a Albert Comellas como su jefe de filas en el Ayuntamiento y pedirle que devuelva al partido el acta como concejal debido a las desavenencias que mantiene con la ejecutiva local, una decisión que el edil ha llevado a la Comisión para la Calidad Democrática del partido.

   El pasado 6 de abril, el PDeCAT celebró una asamblea extraordinaria a la que asistieron 14 asociados de la treintena que tiene el partido en Esplugues, que aprobaron por unanimidad el cese de Comellas, que fue el cabeza de lista de CiU en las elecciones municipales de 2015 y que ostenta el cargo de cuarto teniente de alcalde y responsable del Área de Desarrollo Económico.

   En declaraciones a Europa Press, el presidente del PDeCAT de Esplugues, Pere Clota, ha explicado que "desde diciembre de 2016, cuando entró la nueva ejecutiva, ha habido desavenencias con el concejal, que ha llevado a cabo acciones que la ejecutiva y el partido consideran que están fuera de lugar".

   Según Clota, la situación era "insostenible" por lo que la ejecutiva decidió convocar una asamblea extraordinaria para ponerlo en conocimiento de los asociados, que votaron por el cese de Comellas, a quien le han requerido que devuelva el acta de concejal.

   Por su parte, Comellas ha elevado los hechos a la Comisión para la Calidad Democrática y de Garantías del PDeCAT al considerar nula la decisión de la asamblea, ya que en su convocatoria no se informaba de que se sometería su cese a votación, según ha explicado a Europa Press.

   Actualmente, el PDeCAT cuenta con dos concejales en Esplugues, los que heredó de la antigua CiU, y ambos forman parte del equipo de gobierno que lidera el PSC, un pacto que la ejecutiva demócrata quiere someter próximamente a consideración de los asociados, cuando se cumplan dos años de su firma.

   Uno de los puntos de fricción entre el grupo municipal y la ejecutiva del PDeCAT es la concesión, por parte de la Junta de Gobierno Local, de la licencia de obras del centro comercial del Plan Porta Barcelona, un proyecto que históricamente había contado con el rechazo de CiU.