EL JUICIO DEL 'CASO PALAU'

Un empresario alega que hacía campañas a precio de coste para CDC

Un exasesor fiscal del Palau admite que redactó un convenio para justificar ante Hacienda un pago a Ángel Colom

Fèlix Millet

Fèlix Millet / periodico

J. G. ALBALAT / BARCELONA

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El administrador de una de las empresas acusadas de facilitar el desvío de fondos del Palau de la Música a CDC a través de facturas  falsas ha alegado este jueves en el juicio que se celebra por el saqueo del auditorio que trabajó a precio de coste para las campañas electorales del partido para "ayudarlo" y "echarle una mano" porque la formación ya no estaba en el Gobierno de la Generalitat.

El acusado Juan Antonio Menchen, uno de los cinco socios de las empresas Letter Grafic y Mail Rent, ha asegurado desconocer si las donaciones que hicieron a CDC servían para canalizar las supuestas comisiones de la constructora Ferrovial a la formación a través del Palau de la Música, como sospecha la fiscalía: "No lo creo; si fuera así, lo desconozco completamente".

No obstante, a preguntas de fiscal Emilio Sánchez-Ulled, el acusado sí ha reconocido que, en una fecha que no recuerda entre el 2006 y el 2007, los socios de Mail Rent y Letter Grafic, que facturaban unos tres millones al año, se reunieron con un empleado de la compañía, Salvador O. -que declarará como testigo en el juicio-, quien les propuso que ayudaran económicamente a CDC para "echarle una mano" porque ya no estaban en la Generalitat.

"Nos reunimos los cinco socios y la conclusión que sacamos es que, en las siguientes campañas electorales, el beneficio de las campañas se lo devolveríamos al partido", ha indicado.

El fiscal le ha preguntado entonces si lo que acordaron había sido trabajar gratis para CDC "por amor a la política", a lo que el acusado le ha replicado: "No, todo lo que gastábamos [en los trabajos para CDC] lo cobrábamos; vendíamos la campaña a precio de coste. No perdíamos nada, dejábamos de ganar".

"Si [estos donativos a CDC] no nos perjudicaban, era perfecto. Era apostar por un cliente", ha justificado el investigado, que ha reconocido que en el año 2009, al estallar el escándalo del 'caso Palau', tuvieron que cerrar las empresas, por lo que en las tres campañas que hubo entre el 2010 y el 2011, cuando esperaban poder recuperar las donaciones a CDC, ya no llegaron a tiempo.

LAS FACTURAS FALSAS

Los tres exasesores fiscales del Palau acusados de cooperar en el saqueo de la institución, el abogado Raimón Bergós y los fiscalistas Santiago Llopart y Edmundo Quintana, se han desvinculado de las facturas falsas que presuntamente enmascararon el desvío de fondos y sirvieron a los entonces responsables del auditorio para ocultar a Hacienda las anomalías contables y la salida de fondos en efectivo. Bergós, exasesor fiscal del Palau de la Música y exsecretario del patronato de la Fundació Orfeó Català-Palau, ha declarado que se "coordinara" con los exresponsables de la entidad, Fèlix MilletJordi Montull,Jordi Montull y ha desmentido que estos le hablaran nunca de facturas falsas y que conociera al extesorero de CDC Daniel Osàcar, que también se sienta en el banquillo de los acusados.

Bergós, eso sí, ha reconocido que fue él quien redactó, para presentarlo ante Hacienda, un borrador de convenio entre el Palau y la Fundació Espai Catalunya, cuando todavía no estaba constituida, para justificar que el dirigente de CDC y exlider del extinto Partit per la Independència (PI) Àngel Colomhabía cobrado 75.126 euros en septiembre del 2000. Se los proporcionó Fèlix Millet.

Este dinero fue utilizado, entre otras cosas, para pagar deudas del efimero partido que fundó. Colom reconoció en octubre del 2009 a EL PERIÓDICO que, para pagar esa deuda, contactó con varios mecenas vinculados al catalanismo y que, a través de unos amigos, llegó a Millet. Colom declarará como testigo.