El PSC aprueba la cesión al PSOE de las decisiones sobre su política de alianzas

De la manera más inesperada, el PSC dejará de ser el verso libre del socialismo español, sobre todo, en cuanto al debate sobre el modelo territorial se refiere. La ejecutiva de los socialistas catalanes ha aprobado este lunes por unanimidad el acuerdo con la gestora del PSOE que pone fin a la crisis de relación entre los dos partidos, abierta en octubre por la decisión de los catalanes de votar en contra de la investidura de Mariano RajoyMariano Rajoy, desobedeciendo el mandato de abstenerse que tenían del comité federal. En el documento pactado, el PSOE se ha reservado la supervisión de los acuerdos de gobernabilidad, las coaliciones y alianzas electorales que haga el PSC en Catalunya, ya que todas estas materias estarán sujetas al análisis y consenso de la comisión de coordinación entre ambas organizaciones.

Dicho de otro modo, el pacto del Tinell de diciembre del 2003 entre el PSC, la izquierda por el derecho a decidir (ICV) y, sobre todo, la izquierda independentista (ERC) difícilmente podrá volverse a ver, por cuanto, con toda seguridad, contaría con el veto de Ferraz. En aquella ocasión se escuchó más de una vez al entonces líder del PSC, Pasqual Maragall, e incluso a su primer secretario, José Montilla, que los pactos de Nicaragua se decidían "en Nicaragua [calle donde entonces tenía su sede el PSC]". Ya no más.

El acuerdo, que firmarán este martes en Madrid el líder del PSC, Miquel Iceta, y el presidente de la gestora del PSOE, Javier Fernández, establece que ambas fuerzas "se reconocen recíprocamente como referentes políticos mutuos en sus respectivos ámbitos territoriales".

No obstante, se deja claro que "corresponde al PSOE la definición de la posición política de los socialistas en los asuntos de naturaleza o relevancia constitucional, así como en aquellos la aplicación de los cuales exceda del ámbito territorial de Catalunya", según el documento del acuerdo.Un trasvase del Ebro, por ejemplo, podría entrar en esta categoría.

LA CONTRAPARTIDA

A cambio, y tras haberse puesto en duda el peso del socialismo catalán en la dirección del PSOE, el PSC tendrá "garantizada" su intervención mediante su participación en los órganos del PSOE y en el comité federal, además de que corresponde al PSC "la aplicación en su ámbito territorial de las posiciones políticas y las resoluciones adoptadas de acuerdo" con lo expresado anteriormente.

Se establece, también, que para evaluar estos acuerdos, ambas formaciones "refuerzan" el comité de coordinación política PSOE-PSC, en el seno del cual se "analizarán y consensuarán" la "celebración de acuerdos de gobernabilidad, la política de coaliciones, pactos y alianzas electorales".

Como cabía esperar, la valoración que ha hecho el PSC este lunes, tras sancionar el acuerdo, es muy positivo. Según el secretario de organización, Salvador Illa, el PSC "no pierde peso" ni "recula" en un acuerdo que "fortalece" el protocolo de unidad de 1978 que establece la relación entre ambos partidos y sirve para "prevenir posibles conflictos" futuros.

Sobre la política de alianzas, el dirigente ha recordado que la comisión política "consensuará" los eventuales pactos electorales, si bien "hasta ahora nunca" los socialistas catalanes habían actuando "de espaldas al PSOE".