SEGUNDA ASAMBLEA CIUDADANA

Podemos, congreso de cartón piedra

Primera asamblea ciudadana de Podemos, en Vistalegre (Madrid), el 18 de octubre de 2014.

Primera asamblea ciudadana de Podemos, en Vistalegre (Madrid), el 18 de octubre de 2014. / periodico

IOLANDA MÁRMOL / MADRID

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Nunca en la historia de la democracia española los simpatizantes de un partido habían tenido un poder tan categórico como el que dispondrán los 455.932 inscritos en Podemos Podemos en su segunda asamblea ciudadana, Vistalegre II. En el PP, quienes votan al líder son los 3.128 compromisarios. En el PSOE, los militantes pueden escoger exclusivamente al secretario general. Los morados, en cambio, están llamados a elegir el rumbo político, la estructura, el líder y la cúpula de un partido que entra en una nueva fase. Sin embargo es una elección con cierto truco: las bases comenzaron a votar este sábado y la mayoría lo hará antes de que comience el debate presencial el cónclave.

{"zeta-legacy-destacado":{"strong":"Las urnas se cerrar\u00e1n\u00a0","text":"apenas Iglesias y Errej\u00f3n pisen el escenario en el pabell\u00f3n"}}

La segunda asamblea ciudadana empezará el sábado 11, lo que permite votaciones durante una semana sin que los dirigentes confronten sus proyectos en el pabellón de Vistalegre y sitúa todo el peso de la decisión en la campaña previa. Tanto es así que, prácticamente, cuando Pablo Iglesias e Íñigo Errejón pisen el escenario las urnas se cerrarán. Según lo previsto, el acto comenzará sobre las once de la mañana y a mediodía finalizará el plazo para votar, porque se necesitan 24 horas para hacer el recuento antes de que, el domingo 12, se proclame el vencedor. En breve: la asamblea estatal parece más el teatro de una inmensa escenificación de fuerza que un lugar de reflexión profunda para elegir la hoja de ruta del nuevo Podemos.

DISTINTO DE LA PRIMERA ASAMBLEA

Las prisas de este segundo cónclave chocan con la forma en la que se organizó la primera asamblea, en el 2014: primero se produjo el debate presencial el 18 y 19 de octubre, en aquel pabellón de Vistalegre en el que, ante 8.000 personas, Pablo Iglesias pronunció su célebre “el cielo se toma por asalto”. Cuando terminó, comenzaron las votaciones, y casi un mes después, el 15 de noviembre del 2014, fue proclamado secretario general con el 88,6% de los votos, en un acto en el Teatro Nuevo Apolo de Madrid. Esta vez, en cambio, el proceso es inverso y más apresurado. Los militantes tendrán que decidir más por lo que hayan visto en los medios de comunicación o en las redes sociales que por las escasas horas de debate

{"zeta-legacy-destacado":{"strong":"Echenique acusa\u00a0","text":"al 'n\u00famero 2' de usar la imagen del l\u00edder y\u00a0Alegre se\u00f1ala a Montero y Mayoral de \"conspirar\" para tomar el poder"}}

presencial.

A nadie se le escapa que la fórmula del nuevo Vistalegre fomenta el peso de los liderazgos y la campaña, que se intensifica en su recta final y en la que los cruces de acusaciones han empezado a cobrar más protagonismo que el debate de ideas.

"CONSPIRADORES"

Desde la familia pablista, Pablo Echenique ha criticado a Errejón por utilizar una fotografía en la que se abraza con Iglesias, a pesar de que él mismo hizo campaña usando el nombre y la imagen del líder cuando se enfrentó a la candidata apoyada por el secretario general en las autonómicas de Aragón (2015) y en sucesivas campañas bajo el lema #ConDosPablos.

En plena campaña, irrumpió este domingo la reflexión del cofundador de Podemos Luis Alegre, que acusa al equipo del secretario general de conspirar para tomar el control del partido. "Creo que esto es algo que va a ocurrir casi con seguridad, porque van a lograr parasitar a Pablo hasta destruir al organismo. Estoy seguro de que Pablo se dará cuenta un año o dos después de que le hayan matado los suyos, pero ya será tarde", advierte. Alegre, que hasta ahora había preferido callar sus impresiones y mantenerse al margen, describe en un texto abrumador como "la camarilla" de Iglesias está alejando al líder del sentir original del partido. Es más, por primera vez señala a esas personas. Irene Montero (jefa de Gabinete), Rafael Mayoral (secretario de relaciones con la Sociedad Civil) y Juanma del Olmo (miembro de la secretaría general). Su advertencia es significativa puesto que no es uno de los activos de Errejón y ha decidido dejar la política activa.