El Gobierno pide a los partidos pactar el trato a los políticos imputados por corrupción tras la muerte de Barberá

El trágico fallecimiento de Rita Barberá ha llevado al Gobierno y al PP a querer “reflexionar” sobre uno de los puntos del pacto firmado entre el PP y C'spacto firmado entre el PP y C's para la investidura de Mariano Rajoy. Ese acuerdo exige “la separación inmediata de los cargos públicos que hayan sido imputados formalmente o encausados por delitos de corrupción, hasta la resolución definitiva del procedimiento judicial”.

Los estatutos del PP, por el contrario, establecen que conviene esperar a la apertura del juicio oral para apartar a los afectados y así lo lo recordaron este viernes el PP y el ministro de Educación y portavoz de Ejecutivo, Íñigo Méndez de Vigo. "El PP propone esperar al juicio oral y no tomar la decisión únicamente con la presentación de una querella que puede no tener recorrido alguno. Sabemos muchos casos en los que finalmente ha habido archivo", declaró en la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros.

El también ministro de Educación dijo que, después del "doloroso" fallecimiento de Barberá, "sería bueno que todos los partidos" acordaran la vara de medir a los políticos imputados por ese delito teniendo en cuenta el derecho a la presunción de inocencia.

En esa misma línea y horas antes, el portavoz del PP en el Congreso, Rafael Hernando, reclamó “dar una vuelta” al asunto entre todos los partidos para decidir cuándo hay que apartar a los políticos investigados. Hernando anunció que hablará con todos los grupos parlamentarios para intentar llegar a un entendimiento. Sus comentarios despertaron las suspicacias de Ciudadanos, partido que advirtió de que si se incumple el pacto en este apartado, quedará roto y Rajoy pasará muchas dificultades en una legislatura en minoría.

CASOS ANTERIORES

Fue el vicesecretario general del partido naranja el encargado de dar la voz de alarma. José Manuel Villegas considera que una “desgracia” como la muerte de Barberá no puede implicar “cambios políticos” en ese sentido porque esa medida lo que hace es intentar “recuperar la confianza” de la sociedad en sus representantes y en las instituciones. “Creemos que es el criterio que hay que aplicar y no oí quejarse al PP en Andalucía, cuando le afectó a Manuel Chaves y a José Antonio Griñán, ni tampoco al PSOE en Madrid, cuando los que fueron apartados eran populares”, argumentó. “Debemos ser ecuánimes”, añadió.

A lo que sí está dispuesto Ciudadanos es a buscar la manera de “resarcir” al político que finalmente es absuelto para recomponer su honor, un aspecto que también mencionó Hernando. Villegas intentó quitar importancia a las palabras de Hernando y Méndez de Vigo respecto a la necesidad de cambiar ese punto del pacto porque ninguno de ellos se lo ha comunicado oficialmente. Tampoco lo hizo la vicepresidenta, Soraya  Sáenz de Santamaría, con la que el viernes por la mañana se reunió en su despacho de la Moncloa. Este asunto no salió en una conversación que estuvo copada por el techo de gasto y el calendario legislativo de las próximas semanas.

EL PP “QUIZÁ” TAMBIÉN SE EQUIVOCÓ

Hernando, que el jueves levantó un polvorín por acusar a los medios de comunicación de actuar como "hienas" y "linchar" a la exalcaldesa, se vio forzado a admitir que "quizá" el PP también se "equivocó" al apartar a la senadora de sus filas cuando esta tuvo que responder ante la justicia.

Hernando declaró que con esa decisión su partido intentó proteger a Barberá para que la prensa "dejara de acosarla". Asimismo, en una entrevista en 'Los Desayunos de TVE', admitió que el PP reclamó a la exalcaldesa que abandonara la militancia (también le pidió que renunciara a su acta de senadora, pero ella se resistió) para proteger los intereses electorales populares en las elecciones de Galicia y Euskadi del 25 de septiembre.

Según su argumentación, en aquellas semanas, los medios y la oposición estaban usando el 'caso Barberá' "como munición para atacar a [Alberto Nuñez] Feijóo y [Alfonso] Alonso" y se decidió dar ese paso para no perjudicar la campaña y porque C's exigía apartar a la senadora para alcanzar un acuerdo de Gobierno con Rajoy.