El PP, obligado a justificar la demora del presidente en nombrar Gobierno

Después de recibir con sorpresa la decisión de Mariano Rajoy de tomarse cuatro días para pensar y decidir su nuevo Gobierno, al PP le ha tocado este lunes intentar explicar ante la opinión pública porque su líder, después de llevar meses repitiendo que España necesita un Ejecutivo de “forma urgente”, ahora opta por demorar, una vez más, los plazos y manejarlos a su antojo. El presidente no ha convocado al comité de dirección del PP ni ha comentado con la cúpula, según aseguran fuentes populares, ni por qué ha decidido postergar la elección de su nuevo Gabinete ni quienes formarán parte del mismo. Fiel al hermetismo que le caracteriza, lo más probable es que hable solo con los interesados poco antes de comunicarlo, el jueves, al Rey. Esta situación ha abierto la puerta a que se disparen las especulaciones y una guerra de nervios en el PP, mientras que sus cargos se ven obligados a justificar ante los medios de comunicación la actitud de su líder, así como a contestar una y otra vez si les gustaría ocupar algún sillón ministerial.

El vicesecretario de organización del PP, Fernando Martínez-Maillo, uno de los nombres que suenan para sustituir a Dolores de Cospedal como número dos del partido si la expresidenta de Castilla La-Mancha da el salto al Gobierno, se ha visto, por ejemplo, forzado a tirar balones fuera sobre el relevo en el PP y se ha limitado a señalar que Cospedal es una “magnífica secretaria general”. Asimismo, ha justificado –en una entrevista en Antena 3- la tardanza de Rajoy recurriendo a un viejo refrán: “vísteme despacio que tengo prisa”. En su opinión, es “positivo” que el recién elegido presidente se tome su tiempo porque España afronta un “momento distinto” y una “legislatura diferente” a la anterior.

POSIBLES DECISIONES DOLOROSAS

El gallego Alberto Nuñéz Feijóo, amigo personal del presidente, ha aventurado, por su parte, que Rajoy “tendrá que hablar con gente”, dando carta de naturaleza a una de las impresiones extendidas en el PP: que el jefe del Ejecutivo en plenitud de funciones, tras jurar su cargo este lunes ante el Rey, posterga la presentación de su nuevo Gabinete porque necesita de unos días para tomar decisiones dolorosas como jubilar a algunos de sus ministros y amigos, así como para comunicar su decisión a las nuevas incorporaciones, a las que podría sumarse incluso algún independiente al que haya que convencer del ofrecimiento. El presidente de Galicia –que también está pendiente de tomar posesión- se ha sumado además a aquellos que opinan que, con un Gobierno en minoría, el presidente necesita perfiles pactistas. perfiles pactistasEn una entrevista en Antena 3, ha considerado que la tarea del nuevo Ejecutivo “no va ser fácil” porque tendrá que gestionar “pactos”, y para ello ha apostado por incorporar a personas con amplios “conocimientos”, con perfil "negociador y comunicador".

Pese a que Feijóo ha coincidido en sus consideraciones con algunas de las interpretaciones publicadas por la prensa (que Rajoy necesita tiempo para retirar a algunos ministros o que busca ministros con capacidad de diálogo), el gallego ha aseverado que Rajoy, con mucha probabilidad, está “sorprendido” de los nombres que aparecen en algunas quinielas.

El portavoz adjunto del PP en el Congreso, José Antonio Bermúdez de Castro, ha justificado, por su parte, la tardanza con ironía: “Deje que Mariano hable con Rajoy” para tomar “la mejor decisión”. El diputado conservador se ha sumado –en TVE- a la teoría de que el presidente llevará a cabo una renovación, como en anteriores ocasiones, por adición, lo que le conllevará, en su opinión, a combinar la “experiencia” con la novedad. Bermúdez de Castro se ha mostrado convencido, no obstante, de que el PP “tiene banquillo” tanto en las direcciones territoriales, como en los grupos en las Cortes y el Gobierno.

LA TAREA DEL NUEVO EJECUTIVO

Los populares también comienzan a dar pistas sobre las decisiones que se abrirán paso en la nueva legislatura. Tal como publicó EL PERIÓDICO, el PP considera que el acuerdo firmado con C’s es una buena base para comenzar a legislar y dado que muchas de las 150 medidas son vistas con buenos ojos por el PSOE, el nuevo Gobierno comenzará en primer lugar por buscar su implementación, “dejando para más adelante los temas que separan” a los tres partidos, según ha aseverado el vicesecretario de comunicación, Pablo Casado.