LA CRISIS DEL SOCIALISMO

Una mayoría del grupo del PSOE aboga por dejar gobernar a Rajoy

Javier Fernández

Javier Fernández / periodico

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El PSOE siguió este martes con "la terapia de grupo" para superar el episodio del sábado, según la expresión de uno de sus dirigentes. El presidente de la gestoraJavier Fernández, reunió a todos los diputados socialistas en el Congreso para empezar a contemporizar. Según explicaron varios asistentes, pidieron la palabra 25 de los casi 80 diputados que acudieron a la cita (el grupo tiene 85 escaños) y 22 de ellos quisieron enviar un mensaje: hay que evitar las terceras elecciones porque eso sería lo peor para el PSOE y para España. ¿Dando la abstención a Mariano Rajoy? Ninguno se atrevió a pronunciar la palabra. Pero "a buen entendedor…", soltó tras la reunión la diputada Adriana Lastra, fiel a Pedro Sánchez y a su 'no es no'.

La gestora encabezada por Fernández lleva dos días defendiendo la necesidad de que deben evitar las terceras elecciones y su tesis ha encontrado eco en el grupo socialista, que será el que deberá votar si el líder del PP se vuelve a presentar a la investidura. De los 22 que mostraron estar en sintonía con la gestora, tres dijeron claramente que se debe dejar gobernar a Rajoy: José María Barreda, Antonio Trevín y Ciprià Ciscar.

Los miembros de la antigua ejecutiva de Sánchez prefirieron no hablar y tampoco lo hicieron los diputados del PSCque se mantienen en el ‘no’ al candidato conservador. Solo tres de los asistentes no coincidieron con la opinión de la gestora del PSOE y se mantuvieron en la negativa rotunda defendida por Sánchez (Margarita Robles, Rafael Simancas y Odón Elorza).

LA ACTITUD DE RAJOY

Robles considera que Rajoy "no ha hecho nada" para merecerse la abstención del PSOE. "Hace una semana que han sido las elecciones vascas y ni siquiera ha llamado al PNV para intentarlo. Quiere terceras elecciones", se quejó en el patio del Congreso. El portavoz de los populares en el Congreso, Rafa Hernando, salió a la palestra para azuzar a los socialistas y presionarles para que digan ya si están dispuestos a sentarse a negociar con Rajoy la investidura.

Fuentes del PP señalaron la necesidad de que el PSOE se comprometa también a "facilitar la gobernabilidad", una petición que el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, reforzó al decir que es evidente que Rajoy debe tener "un mínimo de garantías" de que va poder gobernar. "No se trata de ir a una investidura para que haya un Gobierno de 24 horas, sino para que haya un gobierno que pueda gobernar. No se trata de que al día siguiente te presenten una moción de censura", declaró.

CAMBIO DE ESCAÑO PARA SÁNCHEZ

La reunión fue "tranquila", según varios de los asistentes, que agradecieron la "buena voluntad" de Fernández. Menos gustó a algunos de ellos lo que el presidente de la gestora había afirmado horas antes en la Ser. El asturiano alertó del proceso de "podemización" del PSOE. Fernández lamentó que su partido haya intentado parecerse a la formación morada y defendió cambios de funcionamiento, pero siempre respetando la "cultura de partido".

En la cita socialista hubo varias bajas y una destacada: Sánchez no apareció por la Cámara baja. Todos, fieles o no al exsecretario general, lo entendieron. A partir de ahora se sentará en un escaño en la cuarta fila del Congreso --la tercera de su grupo--, y el actual portavoz socialista, Antonio Hernando, ocupará su lugar.