CITA CON LAS URNAS

Catalunya, arma arrojadiza en Euskadi

Los partidos vascos utilizan el 'procés' como amenaza, advertencia o modelo a seguir

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AITOR UBARRETXENA / SAN SEBASTIÁN

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Catalunya está teniendo la esperada dosis de protagonismo en la campaña vasca. Salvo el PNV, que intenta marcar distancias, el resto de formaciones hacen frecuentes alusiones al 'procés', desde sus diferentes intereses; para EH Bildu, es directamente el camino a seguir; para PodemosAda Colau es todo un referente; y para PSEPP Ciudadanos, es el riesgo a evitar.

La Diada, celebrada en plena ebullición electoral en Euskadi, ha sido el termómetro perfecto. El candidato del PNV, Iñigo Urkullu, no hizo ninguna alusión a la fiesta catalana que se estaba celebrando en ese mismo momento. Los actuales gestores peneuvistas han optado por “respetar” las decisiones de los partidos catalanes, pero dejando claro que el camino de Euskadi “debe ser otro”: la búsqueda de un “nuevo estatus” a partir de un acuerdo entre las formaciones vascas que luego debería ratificar la ciudadanía y, en último término, ser aprobado en el Congreso de los Diputados.

El alma más soberanista del PNV sigue latiendo, a pesar de que su proyección pública haya ido decayendo en los últimos años. Incluso su mejor representante, Joseba Egibar, cabeza de lista por Gipuzkoa, ha expresado que Catalunya y Euskadi cuentan cada una “con su hoja de ruta”, y que están unidas porque tienen “el mismo Estado enfrente”.

OTEGI Y PUIGDEMONT

EH Bildu, sin embargo, envidia a Catalunya. Saben que hoy por hoy es imposible llevar al PNV a un frente soberanista que plante cara al Estado, pero no descartan que la nueva legislatura, con la entrada de Podemos en la Cámara de Vitoria, permita acuerdos que hasta ahora eran impensables. El punto de unión entre estas tres fuerzas, que sumarían dos tercios de la Cámara, es el derecho a decidir, un punto de partida de “mínimos” al que la coalición independentista se agarra porque no tiene otro.

La influencia de Catalunya en Elkarrekin-Podemos llega a través de Ada Colau. La candidata vasca de la formación morada, Pili Zabala, ha admitido públicamente que tanto la alcaldesa de Barcelona como la de Madrid, Manuela Carmena, son “símbolos” para ella. “Han demostrado que se puede gestionar de otra manera. Y que se puede hacer bien”. Zabala apela a las ventajas de aportar ‘aire fresco’ para responder a los reproches que le lanzan sus adversarios por su inexperiencia.

EL RIESGO DE "CATALANIZACIÓN"

También la candidata socialista, Idoia Mendia, ha aludido con frecuencia en sus declaraciones de las últimas semanas a Catalunya. Las aspiraciones de su partido pasan por lograr un resultado que le permita tener influencia en la formación del próximo Ejecutivo vasco. De hecho, ya habla sin tapujos de pactos poselectorales, a los que pone un precio: “En ese acuerdo debe estar recogido que Euskadi no entrará en la deriva catalana". 

Los mensajes más virulentos contra el 'procés' han provenido del candidato del PP, Alfonso Alonso. En sus mítines y entrevistas no deja de recordar el riesgo de que Euskadi “se catalanice”, y propone a su partido como la única opción para servir de contrapeso. Aún más incendiaria fue la visita a San Sebastián del ministro de Asuntos Exteriores en funciones, José Manuel García-Margallo, que no dudó en afirmar que “un ataque terrorista se supera, pero la disolución de España es absolutamente irreversible”.

En la misma línea, Albert Rivera ha afirmado en campaña, en una reciente visita a San Sebastián, que el PNV “cada vez se parece más” a la Convergència “de hace unos años”. En concreto, el líder de Ciudadanos le reprochó que pretenda celebrar un referéndum de autodeterminación “incumpliendo las leyes, como ocurre en Catalunya”.