Benet Salellas (CUP) pide "generosidad" al Govern para hallar un acuerdo de presupuestos

Benet Salellas

Benet Salellas / periodico

FIDEL MASREAL / XABI BARRENA / BARCELONA

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En un clima de pesimismo y reproches abiertos entre unos y otros, la única brizna de esperanza respecto a un acuerdo presupuestario entre el Govern y la CUP la ha puesto el diputado 'cupaire' Benet Salellas, mientras los responsables del Govern redoblan la presión a los anticapitalistas. Salellas ha llamadO a buscar "fórmulas" de acuerdo y a que impere el "optimismo" y el respeto a la diversidad. Buenas palabras que sin embargo mantienen el veto de la CUP, es decir, la enmienda a la totalidad, como ha insistido Salellas en declaraciones a TV-3. Por tanto, de momento la invitación del diputado al pacto es más bien retórica, basada en la "generosidad".

En el marco de las distintas conversaciones a varias bandas desplegadas por el Govern para buscar alternativas, estos días ha estado sobre la mesa la hipótesis de que la CUP presentara la enmienda pero con un texto alternativo de presupuestos. Una solución que permitiría a  la CUP rechazar las otras enmiendas y conseguir, así, que las cuentas prosperaran. Pero el reglamento del Parlament, en su artículo 129, no prevé esta salida.

Una opción que, como ha reclamado el vicepresidente y 'conseller' de Economía, Oriol Junqueras, pasa en todo caso, como  ha insistido una y otra vez, en los micrófonos de RAC-1, por impedir el veto pero no el debate:  "No estamos pidiendo [a la CUP] que se aprueben los presupuestos, estamos pidiendo que se puedan debatir". Casi hasta la saciedad ha repetido esta demanda un Junqueras casi a la desesperada mientras su compañero de partido en ERC, el diputado Joan Tardà, mantenía su "convencimiento" de que habrá acuerdo.

BELICOSIDAD CONVERGENTE

Si el tono de los republicanos es de casi súplica, el de Convergència, y el 'president' Carles Puigdemont, sigue siendo de exigencia y enojo. Puigdemont, en declaraciones a Olot TV, reprocha a los cuperos (a los que el viernes llamó  "destructores") que si mantienen el veto y fuerzan una prórroga de los actuales presupuestos generarán una situación "mas autonomista" que independentista. "Si no hay presupuesto elaborado por un Govern independentista como el que presido, lo que habrá será una prórroga de un presupuesto que seguro que no estará más cerca de la independencia". Y  ha añadido: "Me puedo hacer responsable de rendir cuentas ante el Parlament -o ante quien nos ha garantizado la estabilidad- si disponemos de la herramienta de la hoja de ruta hacia la independencia, no de gestionar una prórroga de un presupuesto autonómico".