La ANC, en números rojos

La Assemblea Nacional Catalana (ANC) ha cerrado el ejercicio del 2015 en números rojos: -132.049 euros. El motivo de este saldo negativo es, según explica la entidad independentista a sus socios en los documentos para preparar la asamblea general ordinaria convocada para el próximo 17 de abril, el "ajuste" que ha tenido que realizar por "diferentes actuaciones del Estado"; en concreto, 176.850 euros a Hacienda y alrededor de 40.000 euros más por una sanción de la Agencia de Protección de Datos.

La multa de Hacienda corresponde a la errónea tributación del IVA y el impuesto de sociedades en cuestiones como la venta de viajes de autobús para ir a las manifestaciones de la Diada o la comercialización del 'merchandising' entre los años 2011 y 2014. La entidad, que hace hincapié en que la sanción no se debe a una "falta de declaración de ingresos", debía haber consignado este dinero recibido como fruto de una actividad de "carácter mercantil". Por este motivo, la ANC tuvo que pagar 166.891 euros, a los que sumó unos 10.000 euros más en concepto de intereses de demora.

Por otra parte, la entidad que preside Jordi Sànchez tuvo que afrontar en el 2015 una sanción de 40.000 euros de la Agencia de Protección de Datos por sufrir el robo de datos durante la asamblea general del 2014. Según ha explicado a la agencia Efe el tesorero de la ANC, Marcel Padrós, esto se explica porque "todo robo de datos implica una sanción para la organización de la que han sido sustraídos".

CASI MEDIO MILLÓN PARA EL 27-S

De no haber sido por estos pagos imprevistos, la entidad soberanista hubiera cerrado el ejercicio con un superávit de 128.000 euros, pues ingresó 5.218.846 euros con las cuotas de los socios (1.635.272), las donaciones (1.637.680), la venta de 'merchandising' (1.281.377) y los billetes de autocar (664.517), y se gastó 5.090.348 euros. Al margen de las sanciones, la partida de gastos, explica la organización, ha experimentado un incremento importante ya que se ha "aumentado la plantilla" en nómina. Asimismo, recuerda el "gran esfuerzo económico" que ha supuesto la campaña del 27-S, a la que la entidad aportó 487.754 euros.

Los número rojos de la Assemblea afloran precisamente en un momento de encrucijada políticaencrucijada política a poco más de 10 días de la asamblea general que debe de revalidar a Sànchez al frente de la entidad o bien escoger a un nuevo presidente. La semana pasada arreciaron los rumores sobre candidatos alternativos, como el que fuera cabeza de lista de la CUP el 27-S, Antonio Baños, el escritor Roc Casagran, la abogada Anna Pérez, el dirigente Jordi Sabaté o la activista Simona Levi.

Asimismo, el que fuera número dos de Carme Forcadell en la ANC, Jaume Marfany, protagonizó un agrio intercambio de tuits con la escritora Liz CastroLiz Castro. Esta denunció las presiones que recibió por parte de la cúpula de la entidad para que no optara a presidirla "para preservar la unidad". Castro fue la más votada, pero el secretariado optó por una amplia mayoría colocar a Sànchez de presidente.