Anna Gabriel: "Basta de vacilaciones con la independencia, tocan hechos"

La CUP ha terciado, días después, en la primera fricción vivida en el seno del Govern de Carles Puigdemont a cuenta de la hoja de ruta hacia una eventual independencia. Y lo ha hecho, como era de esperar, para dar un toque de atención a Junts pel Sí: "Declaraciones simbólicas ya se han hecho muchas, ahora tocan hechos, y de los hechos con impacto", ha afirmado la diputada anticapitalista Anna Gabriel en declaraciones a TV-3. "No daremos apoyo a dilaciones innecesarias ni al 'procesismo' por el 'procesismo'" ha sentenciado.

El toque de atención, de hecho, ha sido doble, por cuanto Gabriel, centrándose ya en las políticas del Ejecutivo, ha aseverado que los presupuestos, tal y como los está esbozando el vicepresidente Oriol Junqueras serán difícilmente aprobables, lo que puede entenderse como el inicio del pulso negociador entre JxSí y la CUP.

La diputada anticapitalista ha insistido en que su partido no dará apoyo “a presupuestos injustos”, como serán los del 2016, a tenor de las insinuciones lanzadas por Junqueras, si bien ha admitido que “seguramente que los presupuestos no serán los que se merecen los ciudadanos, como en muchos otros países”. En todo caso, ha considerado “esencial” abordar en ellos reformas en cuanto al pago de la deuda de Catalunya “porque no la podemos pagar y no la queremos pagar” si perjudica a las necesidades esenciales de los catalanes, ha matizado.

Y, evidentemente, Gabriel se ha referido al primer caballo de batalla ya en danza, la reforma del impuesto de sucesiones, que la CUP desea, y desea al alza, para grabar así a la parte de la sociedad con mayor poder adquisitivo, y que el Govern no tiene intención de retocar, tras la última modificación, en la pasada legislatura.  “Sería interesante recuperar algunos como el de sucesiones” porque “no entenderíamos que quien más tiene no pagase un poco más”, ha explicado Gabriel.

La diputada ha abierto las puertas a una prórroga de las cuentas de la Generalitat siempre que “se toquen determinadas partidas que sobran, para generar ahorro, y a la vez se “toquen impuestos y los intereses de la deuda”, ha insistido.