La CUP propuso a Viver Pi-Sunyer como alternativa a ser investido Mas

La CUP puso sobre la mesa el nombre del exmagistrado del TC y presidente del Consell Assessor per a la Transició Nacional, Carles Viver Pi-Sunyer, como alternativa a Artur Mas a la presidencia de la Generalitat.

Según ha avanzado 'La Directa' y ha confirmado la izquierda independentista, la propuesta se planteó el 3 de noviembre en un encuentro de negociación con Junts pel Sí.

La coalición de CDC y ERC respondió con otra oferta: una presidencia con Mas al frente y cediendo peso a tres vicepresidencias en manos de Neus Munté, Raül Romeva y Oriol Junqueras.tres vicepresidencias Neus Munté, Raül Romeva y Oriol Junqueras La CUP se plantea este domingo en el Debat Nacional de Manresa qué camino debe seguir la comisión negociadora.

La CUP y Junts pel Sí han mantenido tres reuniones discretas aparte de la cuarta del 11 de noviembre que trascendió a los medios de comunicación. Fue precisamente en la tercera cuando la CUP, en una reunión a seis voces, propuso que fuera Carles Viver Pi-Sunyer quien presida la Generalitat como alternativa a Artur Mas.

PI-SUNYER SE QUEDÓ FUERA DEL HEMICICLO

En las elecciones del 27-S, sin embargo, el presidente del Consell Asessor per a la Transició Nacional quedó fuera del hemiciclo, ocupaba el puesto 71 en la lista de JxSí. La fórmula para que pudiera ser elegido diputado, el presidente debe ser parlamentario, pasaba por que dimitiera el diputado por Barcelona Jordi Cuminal y que renunciaran al acta de diputado todos los miembros de la lista hasta que entrara Viver Pi-Sunyer. 

Junts pel Sí respondió la CUP en la cuarta reunión, la del 11 de noviembre, que trascendió la prensa. Asistían Mas, Raül Romeva, Josep Rull, Marta Rovira y Oriol Junqueras, y Anna Gabriel, Benet Salellas, y Antonio Baños. En ese encuentro se ofreció Mas como presidente pero cediendo peso hacia tres vicepresidencias fuertes, que asumirían Neus Munté, Raül Romeva y Oriol Junqueras.

De hecho, en la segunda vuelta del debate de investidura Mas puso sobre la mesa además someterse a una cuestión de confianza para que el Parlamento decida si su gobierno debe seguir o no. La primera reunión fue el 21 de octubre y la CUP planteó ya entonces una fórmula para un liderazgo compartido. La propuesta pasaba porque Mas actuara de Comisionado para la Internacionalización del Proceso, avalado por el Gobierno y Parlamento, como un 'conseller' de Exteriores.