Rajoy emplaza al PP a redirigir la campaña hacia la unidad de España

El inminente debate sobre la resolución independentista en el Parlamentresolución independentistaParlament y la ronda de contactos que, en los últimos días, ha impulsado el presidente Mariano Rajoy para hacer frente al agravamiento del desafío independentista ha cambio la campaña electoral de un PP que, según el CIS publicado ayerCIS, sigue en cabeza y a cuatro puntos del PSOE. Así lo demuestra el que este jueves, en una reunión a puerta cerrada con la junta directiva nacional popular -máximo órgano del partido entre congresos-, Rajoy avisara a los suyos de que, además de la economía (que sigue considerando como lo que más importa a los ciudadanos), será tema central en vísperas del 20-D lo que concierne a la "unidad de España".

Los populares, y no lo ocultan, creen que la situación que se vive ahora en Catalunya les va bien electoralmente porque refuerza la figura del presidente (y candidato a la reelección), que es quien tiene la potestad constitucional para dar respuesta y que, además, ha logrado el aval del PSOE, Ciudadanos y agentes sociales. "El Estado tiene instrumentos para evitar un disparate", recalcó Rajoy, en alusión al intento de desconexión con España.

Ante sus compañeros, se refirió a la decisión del Constitucional de permitir el pleno del Palament del lunes con un "hay que respetar las resoluciones judiciales", dado que el PP exige a los demás "que las respeten". Dicho esto, insistió en que él recurrirá la resolución secesionista una vez aprobada y que sabrá actuar "con prudencia y proporcionalidad" en la respuesta jurídica que se vea obligado a dar.

COALICIONES ELECTORALES

La convocatoria de la junta directiva de los conservadores fue un formalismo. Este órgano debía ratificar los acuerdos que el PP ha establecido con el PAR en Aragón; UPN, en Navarra; los Majoreros, en Fuenteventura, y Foro de Asturias (el partido del expopular Francisco Álvarez Cascos), en Asturias. Y lo hizo. Por la mañana, Rajoy se había desplazado a Zaragoza y a Pamplona para firmar unos pactos que darán lugar a coaliciones electorales. A juicio del líder popular, en las próximas elecciones importa hasta "el último voto" que se pueda lograr, dado lo incierto del resultado, según unos sondeos más cambiantes de lo habitual.

Y fue en el acto del presidente en Pamplona, y en presencia de sus socios de UPN, donde se comprometió a derogar de la Constitución la disposición transitoria cuarta, que prevé la incorporación de Navarra a Euskadi, si hay debate sobre la reforma de la Carta Magna.

Resulta sorprendente que Rajoy, quien lleva esquivando desde agosto el debate de la reforma de la ley fundamenal, saque a relucir públicamente esta cuestión y de esta forma. El miércoles, fueron los máximos responsables de UGT y CCOO los que afirmaron que, en su conversación con el presidente, este no había descartado abrir una ponencia sobre la reforma constitucional la próxima legislatura. Paso a paso va preparando el cuerpo a los populares. O eso parece.