CDC y ERC estudian ir juntos parcialmente a las generales

Por si el mapa independentista no estuviera suficientemente revuelto, este jueves el conseller de Presidència en funciones, Francesc Homs, lanzó la piedra y escondió la mano cuando aseguró que CDC y ERC concurrirán juntas a las elecciones generales. En en fondo estaba afirmando casi lo contrario: que no se repetirá la fórmula de Junts pel Sí de una lista conjunta global, porque enseguida matizó que habría una salida «creativa» que no será «exactamente lo mismo» que lo pactado en las elecciones del 27-S, es decir, la lista de nombres de ambos partidos con algunos independientes.

¿Qué será entonces? Oficialmente se mantiene el mutismo, pero la opción de «ir juntos» pero de otra manera solo puede pasar por un acuerdo en Girona, Tarragona y Lleida y parcialmente en el Senado. El objetivo, capitalizar los votos, dado que la ley electoral favorece que CDC y ERC puedan arañar juntos algún diputado o senador más. Homs lo dio a entender cuando apuntó que  la fórmula final será el «que sea más útil y rentable» a los intereses soberanistas. Por ejemplo, ERC cree que en Girona es más operativo presentarse por separado en el caso de la Cámara alta, para optar a un mejor resultado. De hecho, en las elecciones autonómicas de 1999 el PSC, que entonces tenía a Pasqual Maragall como candidato, se presentó junto a ICV en Tarragona, Girona y Lleida.

EL REPARTO / Junts pel Sí rectificó ayer la distribución de escaños del hemiciclo del Parlament. Inicialmente, la coalición soberanista había planteado ocupar la parte delantera de las dos alas del salón de plenos. Sin embargo, las protestas de la oposición, que llegó incluso a firmar un acuerdo en el que se denunciaba dicho reparto, han motivado un replanteamiento: Junts pel Sí y la CUP ocuparán el ala izquierda y el resto se situarán en el flanco derecho. .

La intencionalidad es clara. Situar a los soberanistas en la zona donde siempre se han puesto las fuerzas progresistas. Es más. El futuro president, sea Artur Mas u otro diputado, se sentará donde lo hizo el socialista Pasqual Maragall. La jefa de la oposición, Inés Arrimadas, y los otros 24 miembros de grupo bajarán del fondo a la izquierda para colocarse donde hasta ahora se habían puesto los parlamentarios de CiU.