Los críticos de UDC crean Demòcrates de Catalunya para "refundar" Unió

La plataforma independentista Hereus UDC 1931, que reúne a los críticos de Unió, ha anunciado hoy el nacimiento de Demòcrates de Catalunya, un partido que apuesta abiertamente por la independencia de Catalunya con el que aspiran a "refundar la auténtica UDC". La formación ya ha solicitado su inscripción en el registro de partidos políticos del Ministerio del Interior.

El acto de presentación de la formación en Barcelona ha reunido a un millar de personas y ha servido para marcar distancias con rotundidad con la actual cúpula de UDC, que encabeza Josep Antoni Duran Lleida, y para que este colectivo se presente como el auténtico "heredero" de UDC.

Las principales caras visibles son el secretario de Universitats del Govern, Toni Castellà, y la presidenta del Parlament, Núria de Gispert, quien ha asegurado que esta formación apuesta por estar "al lado" de Artur Mas en los comicios del 27 de septiembre.

Según fuentes de la formación, Demòcrates de Catalunya apuesta de entrada por una lista unitaria que aglutine a todo el bloque soberanista y, si ello no fuera posible, exploraría fórmulas de colaboración con CDC, pero no contempla presentarse en solitario a los comicios del 27-S.

“SALVAR A LA AUTÉNTICA UDC”

Castellà ha afirmado que la nueva formación nace para "salvar a la auténtica UDC", y ha subrayado en alusión al nombre elegido: "Perdemos las siglas (de UDC), pero son letras. Nos podrán quitar las letras, pero no el alma de un proyecto fiel al pueblo".

"Hoy cerramos la puerta y dejamos atrás el Palace y todo lo que eso representa", ha sentenciado Castellà en alusión al hotel donde suele alojarse Josep Antoni Duran Lleida en Madrid, una metáfora que ha usado para ajustar cuentas con la actual dirección de UDC, a la que ha acusado de generar "miedo" entre la militancia.

De Gispert ha opinado que "la UDC oficial" ha optado por defender un proyecto "autonomista y regionalista", ha justificado la coherencia de los críticos de UDC y ha arremetido contra los tres 'exconsellers' de UDC, Ramon Espadaler, Joana Ortega y Josep Maria Pelegrí, por haber defendido estos años junto al 'president' Mas un proyecto político y ahora desmarcarse de estas tesis.

Los 'consellers' Irene Rigau (Ensenyament) y Andreu Mas-Colell (Economia), así como Josep Rull (CDC), Alfred Bosch (ERC) y representantes de entidades soberanistas como Muriel Casals (Òmnium Cultural) y Josep Maria Vila d'Abadal (AMI), entre otros, han arropado a los críticos de UDC en la puesta de largo del nuevo partido.

RUPTURA TRAS LA CONSULTA INTERNA

Esta formación es fruto de la ruptura entre el sector oficial y los críticos tras la consulta interna de UDC del pasado 14 de junio, en la que la dirección de Unió venció por escaso margen y descartó apostar por la independencia.

Para ilustrar las tensiones que ha vivido UDC desde entonces, De Gispert ha comentado que han sido "40 días difíciles" en los que, incluso, ha llegado a perder 5 kilos, y ha contrapuesto la coherencia de Mas, que ha "dado la cara" por la independencia, con la de un Duran Lleida que desde "la suite del Palace" o viajando "en AVE" de un sitio a otro dice que "esto que estamos haciendo (en Catalunya) no tiene futuro".

De Gispert ha achacado la ruptura de CiU a la actual dirección de UDC, y ha añadido que los críticos de Unió "no habrían roto la federación" porque consideran a CDC un partido "primo hermano".

CARRASCO I FORMIGUERA ERA INDEPENDENTISTA, AFIRMA RIGOL

Castellà, por su parte, ha prometido que este nuevo partido "no tendrá militantes", sino "voluntarios", que el comité de gobierno y los territoriales tendrán una relación "entre iguales" y que habrá "primarias de verdad" abiertas a todos para la elección de cargos, y ha espetado: "Será un partido en el cual nunca más nadie pase miedo".

El 'expresident' del Parlament, Joan Rigol, un histórico de UDC, ha subrayado que Manuel Carrasco i Formiguera, fundador de UDC, fue un hombre de convicciones radicales, aunque formas moderadas que deseaba la independencia de Catalunya. Raimon Carrasco, hijo de Carrasco i Formiguera, ha remarcado que su padre "era independentista".