Javier de la Rosa calla ante la 'comisión Pujol' y riñe a los diputados

Un silencio detrás de otro y, para más inri, dando lecciones. El empresario Javier de la Rosa se ha negado a declarar este lunes ante la comisión de investigación del 'caso Pujol' en el Parlament. El financiero barcelonés se ha limitado a anunciar al inicio de su comparecencia que no respondería a las preguntas de los grupos parlamentarios porque ya ha dado explicaciones sobre sus negocios ante los tribunales durante dos décadas. Sin embargo, De la Rosa, persona muy cercana al 'expresident' Jordi Pujol, sí se ha permitido reprender y aleccionar a los diputados: "Una comisión de este calibre tiene que tener los datos exactos de las cosas que se dicen, y no informaciones falsas".

Nada más comenzar la sesión, el empresario ya había advertido de que no abriría la boca: "Dados los motivos por los cuales estoy aquí y porque durante 20 años he declarado sobre estos temas en sedes judiciales diversas, sin mucho éxito, me acojo a mi derecho constitucional a no contestar a ninguna pregunta, con el máximo respeto personal e institucional hacia ustedes". Así, todas las preguntas han quedado en el aire frente a un De la Rosa que ha aguantado el chaparrón impertérrito y que solo ha hecho una excepción para afirmar que la sentencia del 'caso Grand Tibidabo' deja claro que él no tiene "responsabilidad civil" alguna y que, por tanto, no hubo "apropiación de nada, ni un euro".

Después de muchos minutos callado, De la Rosa ha 'explotado' durante el turno de preguntas del diputado de Ciutadans Carlos Carrizosa. "El 100% de las preguntas que se me han hecho están sacadas de periódicos y no se corresponden con el objeto de la comisión. Hay que tener los datos exactos, no se puede intentar empujar a una persona a hablar con datos e insultos personales que no son correctos. Usted solo ha hecho una perorata sobre mi pasado personal. Ustedes no se han preparado los interrogatorios", se ha quejado.

Una de las cuestiones que le han planteado los grupos ha sido la conversación que mantuvo con el 'pequeño Nicolás', en la que aseguraba que se encargó de la financiación de CDC en los años 80 y facilitó al partido hasta 4.500 millones de pesetas para que fuera el equilibrio para esquivar el independentismo. En la misma conversación, el financiero afirmaba que "llevaba por la noche el dinero en efectivo al despacho de Jordi Pujol", y que a Miquel Roca, exlíder de CDC y ahora abogado de la infanta Cristina, se lo llevaba a Suiza.

De la Rosa, que llegó a ser definido como "empresario modelo" por parte de Jordi Pujol, ha estado sumido en las últimas tres décadas en un vía crucis de procesos judiciales, por los que ha ingresado en prisión en tres ocasiones: entre 1994 y 1995, entre 1998 y 2000 y entre 2002 y 2004, por el 'caso Grand Tibidabo', la venta de la papelera ICSA y la operación Wardbase, por los delitos de estafa, apropiación indebida y falsedad documental.