'COMISIÓN PUJOL'
«Ferrusola viajaba a Andorra cada 2 o 3 meses»
Un excoronel de la Guardia Civil dice que España toleraba el fraude fiscal
Su comparecencia en la 'comisión Pujol' fue para coger una bolsa de palomitas y sentarse en la butaca para seguir lo que por el tono en que se explicaba podría haber sido una comedia, pero que en realidad representaba un drama para el ciudadano de a pie dado el cariz de sus revelaciones. José Matas Zapata, teniente coronel de la Guardia Civil ahora retirado, estuvo más de dos décadas destinado en Andorra para ejercer «funciones consulares». Allí conoció de primera mano cómo actuaba el Estado español ante el fraude fiscal. Y esto es: España era muy «tolerante» con este tipo de delito porque su prioridad no era esa, sino combatir «dinero sucio» como el vinculado a actividades terroristas.
La presencia de Matas en la comisión de investigación respondía a que algunas informaciones periodísticas habían apuntado que él ejerció de testaferro de la familia Pujol con los bancos andorranos. Este extremo lo negó rotundamente el teniente coronel jubilado, quien dijo no tener relación alguna ni con el 'president' ni con su familia. El mayor contacto que tuvo con ellos fue que él era el encargado de gestionar los permisos de armas de los escoltas que acompañaban a algún miembro del clan. La madre, Marta Ferrusola, por ejemplo, viajaba «a menudo» al Principado. También el hijo mayor, Jordi. «¿Con escoltas?», se exclamaron algunos grupos. Matas dejó claro que Ferrusola, sí, y que entre 1991 y 1997 sus visitas al país de los Pirineos se producían «cada dos o tres meses», acompañada en ocasiones por alguno de sus vástagos.
PETICIÓN DE INFORME A INTERIOR
Ese comentario lo agarró Carlos Carrizosa (Ciutadans) para pedir a la comisión que solicite a la Conselleria d'Interior un informe sobre cuántos viajes efectuaron los escoltas de la 'exprimera dama' catalana y, si hay motivos, para solicitar la comparecencia de la entonces 'consellera' de Justícia, que no es otra que Núria de Gispert, actual presidenta del Parlament.
Siguió hablando Matas de lo «fácil» que era entrar o sacar dinero de Andorra y admitió que se podría hacer con una bolsa de deporte metida en el maletero del coche, como denunció la exnovia de Jordi Pujol Ferrusola. Ahora bien, agregó el guardia civil retirado, hacer eso era «absurdo» e «insensato» porque se pueden mover grandes cantidades a través de los bancos e incluso o montando un «pícnic» y dando a cada viajero del autobús -que «salían de Terrassa y otras localidades»- un «sobre con dinero» que recoge un socio al otro lado de la frontera. Su conclusión tras tantos años en el extranjero vino a ser algo así como que un poco de fraude fiscal no es malo.
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