¡Vamos, 'president'!

En diciembre del 2012 firmamos un pacto de legislatura que tenía en la celebración de una consulta por la independencia su piedra angular. El pacto fue complejo. Poner fecha a la consulta (2014) y posteriormente concretar la pregunta (independencia) fueron dos escollos importantes que, incluso en algún momento, parecieron insalvables. Pero finalmente el pacto tuvo éxito. Y esto ha permitido avanzar, y también que hubiera una mayoría parlamentaria estable en una legislatura muy complicada. A todo esto, la situación financiera de la Generalitat es insostenible, la falta de recursos empuja hacia un mayor deterioro de las prestaciones públicas, concretamente en el ámbito de la sanidad y de la educación, donde se destina el grueso del gasto de la Generalitat.

Sin poder hacer la consulta y sin herramientas para combatir las desigualdades, la legislatura ha llegado a su final. Así no podemos seguir. Urge completar el acuerdo de legislatura de diciembre del 2012 para obtener un mandato democrático haciendo que la ciudadanía exprese su voluntad sobre el futuro político de Catalunya. La mejor fórmula habría sido una consulta, pero no fue posible a pesar de la admirable y masiva demostración de civismo y voluntad democrática expresada en el proceso participativo del 9-N.

Por eso necesitamos resolver esta cuestión en las urnas. Y por eso creemos que se deben convocar elecciones. El objetivo es conseguir un Parlament con una mayoría absoluta de diputados dispuestos y comprometidos con una hoja de ruta común para la independencia y que, por lo tanto, deberán implicarse directa o indirectamente en la gobernabilidad del país, garantizando una sólida estabilidad de un Govern de concentración que tendrá que afrontar un reto inmenso: convertir a Catalunya en un Estado independiente y trabajar por un país libre y justo.

La disposición de Esquerra Republicana para participar en este Govern de concentración es absoluta. Hay quien ha dicho que sin confianza no se puede avanzar. Estamos de acuerdo, hay que generar esa confianza. Y empezar, si es necesario desde hoy mismo, a trabajar juntos. Y como es imprescindible generar confianza para compartir una hoja de ruta y unidad de acción, creemos que ya ha llegado el momento de dar este paso y dibujar desde hoy mismo este Govern de concentración. No hay que esperar al día siguiente de las elecciones para empezar a hacerlo, sino que es posible y deseable hacerlo simultáneamente: trabajar ya por un Govern de concentración de amplio espectro y, simultáneamente, convocar elecciones.

Durante este excesivo período en que hemos estado debatiendo cómo presentarnos a las elecciones no hemos prestado suficiente atención a lo que es realmente central: acordar todos los pasos a realizar para la independencia, consensuando la hoja de ruta del Govern que lo hará posible. En el debate público, el quién y el cómo han pasado por delante del acuerdo sobre qué hacer y cuándo lo tenemos que hacer.

Estamos dispuestos a participar en ese Govern de concentración porque estamos convencidos de que, poniendo este pilar, sentamos las bases de un entendimiento sólido. En este Govern, ERC quiere aportar una sensibilidad social que es determinante para gestionar un periodo en el que, además de tener la voluntad de ejercer la independencia desde el primer día, habrá que dar respuesta a las necesidades cotidianas de una sociedad que ha sufrido los estragos de una crisis dura y larga.

Para seguir avanzando, pues, las elecciones son imprescindibles. No tenemos otro camino que nos permita obtener el mandato democrático a favor de la independencia. Tal vez no estamos ante la única oportunidad, pero sí que estamos ante una oportunidad única. El calendario nos deja solo unos pocos meses para seguir adelante antes de que nos veamos sumergidos en el ciclo electoral español, antes de que perdamos la iniciativa política y social que ha hecho vibrar nuestra sociedad.

En este sentido, celebramos la concreción pública de diferentes propuestas por parte del president Artur Mas sobre la convocatoria de elecciones para obtener un mandato democrático definitivo a favor de la independencia. Como ya hemos hecho público, ERC da por buena la propuesta de listas hecha por las entidades soberanistas -obviamente respetando la libertad y la independencia de las entidades y personalidades que puedan verse implicadas- y así hacer posible que las elecciones sean antes de las municipales, de acuerdo con el deseo y la posición expresada por las propias entidades, y con el sentir ampliamente mayoritario de la ciudadanía.

En definitiva, ERC está convencida de que podemos afirmar que, a partir de la propuesta de las entidades de la sociedad civil, ya hay un acuerdo para celebrar una consulta definitiva sobre la independencia este mes de marzo, que abre el período constituyente del nuevo país.

¡Avanzaremos juntos, con una alianza amplia, y lo conseguiremos!