La carrera sucesoria

Miquel Iceta, de 'fontanero' en la Moncloa a 'señor Lobo'

Diputado y aspirante a la primera secretaría del PSC

X.B.
BARCELONA

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Antes de que Aaron Sorkin ideara esa almibarada visión de los entresijos de la Casa Blanca (El ala oeste), aquellos que trabajaban al más alto nivel de un Gobierno eran conocidos como fontaneros. Así empezó Miquel Iceta, a principios de los años 80 y en la Moncloa, de la mano de Narcís Serra.  No. No es un renovador, sino más bien aquel entrenador de la casa siempre al quite de hacerse cargo del equipo cuando las cosas van mal. O el Señor Lobo de Quentin Tarantino. Por sus manos han pasado las negociaciones del tripartito, del Estatut y el acuerdo federalista entre PSC y PSOE.  Número 2 del partido con José Montilla (la aportación de Iceta en el congreso de Sitges al lado de los capitanes fue clave), estableció con este y con José Zaragoza un triunvirato que el tiempo convirtió en resquemor entre él y el secretario de organización.

Retorno a los focos

En el anterior congreso, Zaragoza auspició la candidatura de Pere Navarro, cosa que obligó a Iceta a dar un paso atrás en su intención de dar la batalla por la primera secretaría. Abandonó la dirección del PSC y del PSOE. «En aras a la renovación», dijo. En el Parlament dejó de ser el portavoz socialista y se refugió en la Mesa. Pero la dimisión de Zaragoza por las escuchas de La Camarga le hizo volver al comité federal. Y ahora puede convertirse en el nuevo líder.