Ofensiva diplomática

Unos (sean soberanistas o contrarios) saben que gran parte de la partida catalana se juega fuera. Los otros, los representantes internacionales, tratan de descifrar lo que ocurre acudiendo directamente a las protagonistas. En los últimos meses, tanto el Govern de Artur Mas  como el Ejecutivo central y el PP catalán han redoblado la ofensiva diplomática para recabar apoyos a su causa. Informes, cartas, viajes... Y reuniones, muchas reuniones, con cónsules y embajadores para ofrecer su versión del proceso. Mas ya insistió el viernes en que es clave explicar su proyecto «en las cancillerías».

No hay semana que en el Palau de la Generalitat, el president o sus colaboradores (el conseller Francesc Homs, el secretario general de Presidència, Jordi Vilajoana, o el secretario de Afers Exteriors, Roger Albinyana) no reciban a un cónsul o embajador. Discretamente. Desde el pasado otoño, el Govern ha incrementado su ofensiva diplomática, como explica el propio Albinyana: «Estamos en una segunda etapa, en especial desde que se acordó la fecha y la pregunta del referendo».

Amparo internacional

Una fase basada en «la diplomacia internacional, con contactos directos con representantes de países, presenciales o a través de redes de comunicación» y un «despliegue mediático», describe el responsable de Exteriores. «La comunidad internacional está más expectante respecto a lo que sucede; ahora nos observan, en el pasado, no», describe. Este trabajo trata de preparar el terreno, entre otras cuestiones, para la posible petición de amparo internacional si el Estado prohibe la consulta de noviembre.

Al respecto, ayer el secretario de organización de Convergència, Josep Rull, confirmó en una entrevista en el Canal 3/24 que «si se cierran todos los mecanismos legales para poder usar las urnas», la opción pasará por «como pueblo pedir amparo internacional para poder consultar a un pueblo sobre su futuro».

Tampoco en el Ejecutivo central y en el PPC se quedan quietos. Mucho se ha escrito y polemizado sobre los extensos informes auspiciados por el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, en los que se augura que una Catalunya independiente quedará empobrecida y fuera de la Unión Europea. Pero no solo en el Gobierno de Mariano Rajoy se promueve esa línea argumental allende la península Ibérica.

El PPC apoya a Margallo

La presidenta del PPC, Alicia Sánchez-Camacho, que tiene hilo directo y continuo con el ministro, aseguran en su partido, también ha tomado cartas en el asunto. Explicó su visión del órdago soberanista en Dublín, en el congreso de los populares europeos del pasado mes de marzo, y en Manchester, en la conferencia anual del partido conservador británico, donde tomó nota de las campañas que se hacen allí para combatir el independentismo escocés. También ha efectuado viajes de trabajo a París y Bruselas (donde aprovechó para reunirse con diversos eurocomisarios).

Sumado a esto, la líder de los populares catalanes ha incorporado a su agenda numerosos encuentros en Catalunya con delegados internacionales, muchos de ellos solicitados por los propios representantes extranjeros. En los últimos 15 meses, informan fuentes del PPC, Camacho se ha reunido con 12 embajadores. Aparte, el 28 de marzo tuvo un almuerzo con el cuerpo consular en Barcelona, en el que están representadas decenas de países.

Con algunos de estos cónsules,  muchos de la UE, la dirigente conservadora se ha reunido individualmente en la sede del partido, una acción que los populares catalanes han redondeado con otros contactos que trascienden lo político, pues  Camacho y otros miembros de su partido también han mantenido conversaciones con empresas multinacionales de primer nivel, así como con otro tipo de organizaciones extranjeras, entre ellas, la Fundación Konrad Adenauer, el que fuera primer canciller de la República Federal de Alemania y uno de los padres de la construcción europeísta.

Por su parte, el Gobierno catalán mantiene en secreto los nombres de sus interlocutores, pero también sostiene que entre ellos están los think tanks más influyentes. ¿Qué resultado dan estas reuniones? Existe «estupefacción», en palabras de Albinyana, por la actitud del Gobierno de Rajoy.

«Notamos un cambio cualitativo importante  desde hace un tiempo  -describe el responsable de Afers Exteriors de la Generalitat- en la medida en la que somos capaces de que nos conozcan más, y ciertos elementos de resistencia iniciales empiezan a desaparecer».

Declaración unilateral

La Generalitat guarda en secreto sus planes alternativos y reitera que seguirá buscando una solución dialogada. Esa es una de las claves para poder lograr el amparo internacional al que CiU ya hace referencia. Albinyana sugiere que habrá «otras vías» pero opta por la prudencia.

En el escenario internacional existen precedentes de declaraciones unilaterales de independencia (DUI) . Al respecto, el responsable de la política exterior de Mas es también cauto. «Como Govern, la vía que nos gustaría usar es la dialogada, negociada y pactada, un proceso de este tipo tiene una vertiente doméstica fundamental». Pero añade: «Existen precedentes, ha habido casos en la historia en que las declaraciones unilaterales han servido para lograr una negociación, forzada desde dentro o desde fuera».