Los sectores del PSC miden hoy sus fuerzas en las primarias de BCN

Todos los barceloneses mayores de 16 años y los extranjeros empadronados en la ciudad están convocados hoy a participar en las primeras primarias abiertas de un partido en Catalunya. Un pionero experimento de regeneración democrática con el que el PSC aspira a reconciliarse con uno de sus grandes fortines electorales, pero que podría convertirse en un torpedo en la línea de flotación de la dirección que lidera Pere Navarro. El vencedor de este proceso no será solo el candidato socialista a la alcaldía en el 2015, sino también el líder que dirigirá la oposición a Xavier Trias en lo que queda de mandato, desde dentro o desde fuera del ayuntamiento. La victoria de un aspirante crítico con la cúpula infligiría un revés a la estrategia del primer secretario y pondría de nuevo a prueba la convulsa convivencia interna en el PSC.

Salvo que el vencedor de hoy consiga el 40% de los votos y saque al menos 10 puntos al segundo, la pugna se dirimirá en la segunda vuelta, el 5 de abril. Pero el voto popular descabalgará hoy a tres de los cinco candidatos en liza: Jaume Collboni, Rocío Martínez-Sampere, Jordi Martí, Laia Bonet y Carmen Andrés. Aunque los vaticinios deben cogerse con pinzas por la falta de precedentes, la mayoría de quinielas apuestan por un cara a cara entre un aspirante afín a la dirección y otro díscolo. Collboni y Andrés se situarían en el primer grupo y Sampere, Martí y Bonet, en el segundo. Pero la previsión de una participación discreta (hay unos 21.000 inscritos entre afiliados y foráneos) han acrecentado el temor en las candidaturas críticas a que los militantes y simpatizantes acaben decantando la balanza a favor de los aspirantes más cercanos a Navarro.

No en vano, el grado de afinidad a la dirección, así como el debate soberanista, ha propiciado los golpes bajos de una campaña bastante anodina ante la escasa disparidad de criterios entre los modelos de ciudad que ofrecen los cinco aspirantes. Collboni, que marcó distancias con la dirección renunciando a su escaño en plena campaña, no ha rehuido el choque dialéctico con Martí, que, en su apuesta abiertamente soberanista, ha logrado el apoyo de los tres diputados arrinconados por Navarro y de la vieja guardia.

SUMA Y SÍNTESIS / Tratando de abrirse paso entre el «inmovilismo» [Collboni] y el «rupturismo» [Martí], Bonet y Sampere se han presentado como las únicas garantes de la recomposición del PSC. «Síntesis» y «suma» han sido las palabras que más han repetido. Aunque han intentado que el cisma interno no monopolizase la campaña, Bonet se ha encargado de dejar claro que no votó a Navarro en el último el congreso del PSC. En cambio, Martínez-Sampere ha preferido mantener una calculada ambigüedad en sus mensajes.

La visión más local y el perfil más izquierdista lo ha puesto Andrés. La edila atesora un gran apoyo en Nou Barris, único distrito que sobrevivió al naufragio socialista en la ciudad. De ahí que algunas fuentes la consideren «la gran tapada» y no la descarten para la segunda vuelta. La dirección del partido está satisfecha por el desarrollo de la campaña y espera que todos los candidatos cumplan la promesa de apoyar al ganador sin reticencias por el bien del PSC.