Carles Martí renuncia a la primarias del PSC en Barcelona

El primer secretario del PSC de Barcelona, Carles Martí, ha decidido no concurrir a las elecciones primarias que elegiran al candidato socialista a la alcaldia de la capital. En rueda de prensa, Martí ha justificado su decisión en la conveniencia de no añadir otro nombre a la "paleta" de candidatos y precandidatos que ya existe (podrían ser hasta siete), y de no abrir, en paralelo a las primarias, el melón de un congreso extraordinario en la federación, pues de haberse presentado tendría que haber renunciado al liderazgo del partido.

En las últimas semanas se había especulado con la posibilidad de que Martí, que comparece en rueda de prensa este martes a las 12.00 horas, se presentara a las primarias, y de hecho, el que fuera primer teniente de alcalde con Jordi Hereu ha mantenido en los últimos dias reuniones con los líderes de las agrupaciones de distrito para calibrar qué posibilidades tenía.

"Ya hay candidatos suficientes para reflejar la pluralidad de sensibilidades del PSC de Barcelona. Mi papel debe ser ahora garantizar la neutralidad del proceso", ha asegurado antes de prometer que no avalará ni apoyará en público a ninguno de los aspirantes. También ha descartado convocar un congreso extraordinario después de las primarias del 29 de marzo.

El PSC celebrará las primarias para escoger al candidato a alcalde el próximo 29 de marzo y, en caso de que sea necesaria una segunda vuelta, esta tendrá lugar el 5 de abril. Hasta ahora, han anunciado oficialmente su intención de presentarse el actual presidente del grupo municipal socialista en Barcelona, Jordi Martí; la concejala del mismo grupo Carmen de Andrés, la exdiputada Laia Bonet y el militante Manel Fernández.

El riesgo de fractura

Respecto al impacto que puede tener una posible fractura en el grupo parlamentario socialista, Martí ha reconocido que "el gran peligro" de las primarias será que el debate nacional "lo acabe contaminando todo", porque relegaría el debate sobre el modelo de ciudad. Pese a las malas expectativas que los sondeos otorgan al PSC, Martí ha afirmado que "todo está por jugar".