La iniciativa

A la secesión en castellano

Testimonios 8 Captura de la presentación viral de la plataforma.

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JOSE RICO
BARCELONA

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No es casual que el independentismo haya reforzado su campaña explicativa en el área metropolitana de Barcelona. Tampoco lo es que en este empeño de extender su causa repartan trípticos en castellano. Y menos casualidad resulta que el líder de ERC, Oriol Junqueras, redoblase en el debate de política general sus guiños a los catalanes de habla castellana para que se impliquen en el proceso soberanista para demostrar su integración en Catalunya. A este colectivo se considera, por sus ligazones familiares con el resto de España, el gran saco de indecisos de una futura consulta independentista. Pero una parte quiere sacudirse esta etiqueta.

«Yo nací en Extremadura, quiero a mi familia de Extremadura. ¡Pero mi tierra es Catalunya! Me ha dado más de lo que podía esperar: la vida que tengo, una esposa y una hija. Yo voto independencia por amor a Catalunya, pero no por la caja». Antonio Cuadrado, nacido en plena dehesa extremeña y afincado en Sabadell, es uno de los integrantes de Súmate, una plataforma que se constituirá el jueves en el Centre Cultural de Bellvitge con el objetivo de romper tópicos. Son ciudadanos nacidos fuera de Catalunya o que tienen el castellano como lengua materna y defienden la secesión para garantizar «un futuro mejor» a sus hijos, muchos de ellos nacidos ya en Catalunya.

Se han organizado en una asociación «transversal, no partidista e independiente» que quiere servir de altavoz para los argumentos a favor del derecho a decidir y la necesidad de construir «con urgencia» un Estado catalán. «Somos gente mayoritariamente de origen español y con lazos afectivos con personas y territorios de España con los que no queremos romper emocionalmente. Pero denunciamos enérgicamente el maltrato injusto que los gobiernos de España, con sus políticas, han efectuado contra Catalunya, económica, social y culturalmente», sostienen los promotores en uno de los trípticos que repartirán en el acto de la próxima semana, titulado Juntos vamos a construir un nuevo país.

Su nombre, su página web (www.sumate.cat), su lema, sus panfletos, sus perfiles en Twitter y Facebook, sus carteles y el vídeo viral que presentarán el jueves. Todo el material de esta asociación se difunde íntegramente en castellano. «Ni renunciamos a nuestra identidad, ni renunciamos a un futuro mejor», reza uno de los lemas. Otro folleto lo dedican a intentar despejar dudas acerca de la viabilidad de un Estado propio. Defienden que no habrá problemas para utilizar el castellano ni para mantener la nacionalidad española si se quiere, que las pensiones estarán garantizadas, que las empresas no se irán de Catalunya y que no habrá fronteras con España ni con Europa. «El beneficio será mutuo, tanto para los españoles como para los catalanes», asegura Ireneu Castillo, nacido en L'Hospitalet, de madre zamorana y padre manchego.

En otra lengua

«Somos un mensajero distinto, con otro lenguaje y otra lengua que hasta ahora el proyecto del catalanismo no había tenido en cuenta. Nos dirigimos a nuestros primos, hermanos, vecinos, amigos. Y lo hacemos como sabemos y como habitualmente nos expresamos», explican los impulsores, que no esconden que su target será el área metropolitana, donde creen que el debate soberanista está «ausente o distorsionado».