REVISTA DE PRENSA

Rajoy se moviliza para asfixiar el pacto CiU-ERC; baraja destituir a Mas y suspender la autonomía de Catalunya

Los seis diarios de Madrid cierran filas en torno al Gobierno español y a su decisión de dinamitar la opción soberanista catalana

portada-el-punt-avui-20-12-

portada-el-punt-avui-20-12- / periodico

XAVIER CAMPRECIÓS / Barcelona

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Es la guerra. El pacto de legislatura firmado porMas yJunqueras, los líderes de las dos primeras fuerzas del Parlament deCatalunya que incluye la celebración de una consulta soberanista el2014,tiene la virtud de uniformar el quiosco madrileño de hoy. Las primeras páginas de los cinco diarios de más audiencia de la capital del Reino de España explicitan la voluntad delGobierno de Rajoy de movilizar todos sus recursos para asfixiar elpacto de CiU y ERC, lo que supone que baraja la destitución de quien ha de ser reelegido president de la Generalitat y la suspensión de la autonomía de Catalunya. Así titulan las portadas de El País y El Mundo --que además de compartir hoy enfoque informativo comparten hasta la foto de primera de Mas aplaudiendo a Junqueras--, y así lo ratifican las demás diarios.

El quiosco barcelonés, por su parte, consagra en sus primeras páginas la presentación del acuerdo de legislatura y hace un hueco entrenador del Barça, Tito Vilanova, que debe volver al quirófano de urgencia por un cáncer.La portada de EL PERIÓDICO abre conuna entrevista exclusiva con Oriol Junqueras.

Las portadas de Madrid

El País: "Rajoy moviliza todos sus recursos para asfixiar el pacto CiU-ERC. El Gobierno prepara un amplio plan de medidas judiciales, políticas y económicas para que Mas se vea forzado a romper con Esquerra"; "Goya y Velázquez hacen caja por el mundo. El Prado combate la falta de ingresos con la exportación de exposiciones"; "Los científicos toman la calle contra el duro recorte en I+D. Protestas en toda España por lasangría de fondos y talento"; "El auge de líderes nacionalistas desata un clima de guerra fría en Asia"; "Y al año y medio del robo... el deán dimitió"; "La recaída de Vilanova pone en vilo al fútbol".

El Mundo: "El Gobierno baraja destituir a Mas y suspender la autonomía de Catalunya. 'Estamos dispuestos a ir a por todas', aseguran fuentes de la Moncloa ante la amenaza del pacto de CiU y ERC de convocar un referendo ilegal. Mas castiga a sus votantes con nueve impuestos de ERC"; "El PSE rechaza en Alava los presupuestos y apoyo los de Bildu en Guipúzcoa"; "El Mundo acaba 2012 como líder en internet por decimoquinto año consecutivo"; "La recaída de Tito conmociona el fútbol".

Abc: "Una quimera ilegal. El Gobierno recurrirá a la ley y al diálogo frente a la espiral secesionista de Mas"; "El cáncer golpea de nuevo a Tito Vilanova"; "La Princesa, en el Museo Abc"; "Rajoy decide 'no solicitar' el rescate, pero no renuncia a hacerlo en el futuro"; "Corrupción en Catalunya: El 50% de la compañía es para Sergio, Oriol y nosotros', afirma un implicado en las ITV".

La Razón: "Oriol Pujol medió con la Hacienda catalana para que sus socios no pagaran 1,4 millones"; "No habrá 'nación catalana'. Rajoy utilizará el artículo 161.2 de la Constitución contra las medidas encaminadas a construir un Estado propio. El Gobierno llegará hasta la vía penal si Mas se empecina en convocar la consulta"; "Tito Vilanova se enfrenta a su peor rival"; "El capital vuelve a España: 50.000 millones desde agosto, mientras la prima cae a 383 puntos". "El falso encierro de Tomás Gómez por la Sanidad en la Asamblea madrileña: se fue a dormir de dos a ocho".

La Gaceta: "Cospedal se ratifica en que fue espiada. La 'número dos' del PP acusó en el 2011 al PSOE de alentar el seguimiento a varios dirigentes populares, así como la investigación de su patrimonio. Ayer declaró ante el juez"; "Aznar invita al Rey a liderar un gran pacto de unidad nacional. Plantea una declaración conjunta de PP, PSOE y UPyD con el 'compromiso' de 'mantener la nación. Rajoy amenaza a Mas con la vía penal si continúa con su empeño separatista".

Las portadas de Barcelona

EL PERIODICO: "Oriol Junqueras, presidente de Esquerra Republicana: "El objetivo es eliminar los recortes ideológicos. Si impiden la consulta, otras elecciones serían un aval democrático". Mas llama a los partidos a sumarse al acuerdo de CiU y ERC. El president advierte de que el nuevo Govern tendrá adversarios muy poderosos. La tasa de pisos vacíos no afectará a los particulares y se gravarán los refrescos"; "El Barça espera a Tito "muy pronto". El entrenador será operado hoy y recibirá tratamiento anticáncer durante seis semanas"; "El transporte público de Barcelona subirá de media por debajo del IPC".

La Vanguardia: "Mas y Junqueras firman con la vista puesta en otoño del 2014. CiU y ERC pactan el camino hacia "el éxito" de la consulta. El acuerdo prevé crear o subir una docena de impuestos. Unió no avaló el documento hasta 15 minutos antes de la firma"; "Vilanova vuelve a luchar contra el cáncer".

Ara:"Compromesos. Mas i Junqueres es conjuren davant els reptes de la crisis i la consulta"; Ànims, Tito"; "Wert manté el porjecte sense canvis"; "El 'banc dolent' no oferirà pisos de lloguer social".

El Punt-Avui:  "Pacte d'Estat. Acord: Mas i Junqueres signen l'històric acord d'estabilitat entre CiU i ERC. 2014: La crisi i l'horitzó de la consulta, la clau. Contraatac: L'Estat manté el to de prepotència i aprofundeix en la tàctica de l'amenaça. Reaccions: El PSC i ICV se senten exclosos i el PP y C's es mostren apocalíptics. Món: La premsa internacional valora el pacte"; "#ÀnimsTito"; "L'atac contra el català s' estén ara als cursos per a aturats"; "Les cartes a Wert dels lectors d'El Punt-Avui, a Madrid"; "L'arxiu de l'Avui, disponible a la xarxa".

El editorial de El País

Se titula "Mas sigue a Esquerra. CIU se somete al partido de Junqueras con un pacto intervencionista y secesionista". Ahí va:

"Artur Mas ha tomado el peor de los caminos posibles. Su pacto soberanista de legislatura con Oriol Junqueras (ERC) puede ser legítimo. Pero es el peor de los escenarios imaginables, sobre todo en las actuales condiciones de crisis financiera y de falta de liquidez que sufre la Administración catalana.

 El acuerdo no se propone superar las líneas divisorias internas de la sociedad catalana evidenciadas en las últimas elecciones. Al revés, su aplicación tenderá a agravarlas. Y a profundizar también el progresivo desencaje de Cataluña en el conjunto español. Anuncia y baliza en sus puntos programáticos una legislatura conflictiva, áspera y llena de incertidumbres: lo menos indicado para la recuperación económica.

Con este acuerdo, Mas desecha otros teóricamente posibles, que descartó casi de entrada. Con el PP, lo que ya parecía difícil por su deriva hacia el independentismo y la querencia centralista de los populares, pero que no era impensable, dada su coincidencia en políticas de austeridad. O con el PSC, con el que compartían el objetivo de realizar una consulta a la ciudadanía sobre la independencia, si bien los socialistas lo condicionaban a que fuese legal, mientras que CiU lo dejaba, y lo deja, en una peligrosa indeterminación que ni siquiera su socio de Unió comparte.

De forma que Artur Mas ha elegido a este socio, y no a otro, deliberadamente. Hasta el punto de sacrificar una de las principales demandas de Duran i Lleida, que se oponía a la fijación de una fecha para el referéndum independentista y tendrá ahora, cuando se ha establecido su celebración para 2014, la ocasión de demostrar la solidez de su antisecesionismo.

La subordinación de CiU a ERC no se agota en el calendario. También aflora en el blindaje del pacto, mediante su control por cinco organismos y grupos de trabajo extraparlamentarios bipartitos (tripartitos, si se cuenta a Unió), que colocan a la Cámara en una posición menguante. Es un Gobierno de coalición de facto, aunque con consejeros de solo una de sus facciones.

La primogenitura del partido ausente del Ejecutivo formal, Esquerra, se prolonga en unas medidas que pretenden construir un Estado ajeno al español y en el intervencionismo que destila su programa económico, opuesto al ideario liberal que CiU propuso a sus electores. No es extraño que los empresarios, que optaron por la discreción durante la campaña, hayan expresado rotundamente su desazón. El malestar aqueja a la gran patronal, Fomento; a la Cámara de Comercio, más técnica; y a la pequeña y mediana empresa de la Pimec, vinculada a la propia CiU.

La oposición empresarial no se debe solo al capítulo fiscal del acuerdo. Este recupera algún impuesto (sucesiones) enfáticamente suprimido por el propio Mas en la anterior legislatura, y dribla el boicoteo del Gobierno a las tasas autonómicas sobre depósitos bancarios. Pero también propone la implantación de un sinfín de nuevas gabelas (sobre bebidas azucaradas, grandes superficies, gases contaminantes, viviendas desocupadas, patrimonio...). La aparente orientación redistributiva de algunas de estas figuras impositivas pretende operar como un velo respecto a los recortes de los servicios sociales en los que tan expeditivo se mostró el primer Ejecutivo de Artur Mas.

El aroma intervencionista es inconfundible. La creación de un banco público sin perfil definido (originariamente, banco central) y la de otros organismos y observatorios prescindibles, y el carácter residual de sus propuestas de simplificación administrativa traslucen una obsesión burocrática contradictoria con las recetas del primer Mas que ganó las elecciones de 2010. El segundo Mas de 2012 se parece al primer Junqueras, al que le está regalando, a cambio de nada, el liderazgo del catalanismo".

Y los de El Mundo y Abc

El Mundo lo titula "Ha llegado la hora de plantar cara a Artur Mas". Y acaba así: "Rajoy está más que legitimado no solo para no dar ni un solo euro para financiar la soga con la que Mas quiere ahorcar a España sino además para condicionar cualquier ayuda a la supresión de todas las subvenciones del Gobierno catalán a los proyectos y plataformas independentistas. Dado que la política de conciliación no ha servido para nada, ha llegado la hora de plantar cara al separatismo con

todas sus consecuencias".

Abc titula el suyo así: "Mas, sin opción frente al Estado". Y termina de esta forma:

"Mientras el pacto CiU-ERC da oxígeno a los nacionalistas frente a la acumulación de casos de corrupción, cada día que pasa más evidentes, el Gobierno de Rajoy, por más empeño que ponga ¿y hace bien en actuar así¿ en tratar el problema con mesura y ofrecimientos de diálogo, ya está emplazado a preparar los instrumentos políticos, legales y constitucionales contra el referendo ilegal. El primero de ellos es una deslegitimación activa del discurso soberanista, con una clara proyección en el ámbito internacional, y especialmente europeo, donde se haga visible el coste de romper la integridad territorial de España. Un coste que se traducirá con la inmediata expulsión de Catalunya de la Unión Europea. A partir de ahí, la impugnación de cualquier acuerdo del Gobierno o del Parlamento catalán ante el Tribunal Constitucional tendrá el efecto inmediato de la suspensión cautelar y su posterior declaración de inconstitucionalidad. Y si a pesar de estos pronunciamientos los nacionalistas perseveran en la comisión de un acto ilegal, el Gobierno podrá instar al Ministerio Fiscal a denunciar ante la justicia penal a las autoridades y los parlamentarios que insistan en desobedecer sentencias y aprobar resoluciones ilegales. Por supuesto, si, además, el pacto CiU-ERC se traduce en una política económica insolidaria con el resto de España y contraria a las directrices comunes marcadas por el Gobierno, con el resultado de que aumenta el déficit catalán, la ley de estabilidad presupuestaria, que desarrolla el nuevo artículo 135 de la Constitución, junto con el artículo 155 de esta norma fundamental, permite al Ejecutivo central intervenir las finanzas autonómicas. Artur Mas ya sabe a qué se enfrenta".