Cambios en la Carta Magna

ICV pide explicaciones a los senadores

«Rubalcaba es capaz de vender una nevera en el Ártico», afirma Herrera

EL PERIÓDICO
BARCELONA

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Los partidos de la izquierda minoritaria exploraron ayer diferentes fórmulas de hacer visible su rechazo a la reforma constitucional y su reclamación de un referendo. El líder de ICV-EUiA, Joan Herrera, fue el más original al reclamar que los senadores catalanes por designación autonómica (lo que no salen elegidos en los comicios generales) argumenten en el Parlament las razones de su voto en la Cámara alta.

«No puede ser que de una de las cosas que más afecta al país no se hable en el Parlament, y que los senadores no vengan a explicarse», dijo. La iniciativa de Herrera se basa en que, según el reglamento de la Cámara catalana, se necesitan solo dos grupos para forzar esa comparecencia, lo que la hace especialmente viable. El líder de Iniciativa avanzó que se pondrá en contacto con ERC, que también rechaza la modificación de la Carta Magna, para unir fuerzas y conseguir su propósito.

Herrera insistió en presionar a los parlamentarios socialistas para que se unan a las 35 firmas de diputados o 26 de senadores necesarias para convocar el referendo. «Rubalcaba es capaz de vender una nevera en el Artico y una estufa en el Trópico, pero lo de no hacer el referendo no lo puede explicar, porque no hay un solo argumento», ironizó.

ATENTADO AL ESTADO DEL BIENESTAR / Izquierda Unida (IU), que comparte grupo en el Congreso con ICV-EUiA y ERC, apostó por la vía más tradicional y anunció su participación activa en las movilizaciones convocadas por los sindicados y asociaciones cívicas para los próximos días. El coordinador federal de IU, Cayo Lara, calificó la reforma constitucional como «el mayor atentado contra el Estado del bienestar cometido en los últimos tiempos».