la estrategia de los conservadores

Rajoy llama al PP a la contención ante el giro «radical» de Rubalcaba

El presidente del PP, Mariano Rajoy, junto a los populares Ana Mato y Pío García-Escudero.

El presidente del PP, Mariano Rajoy, junto a los populares Ana Mato y Pío García-Escudero.

GEMMA ROBLES
MADRID

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La actual dirección del PP está convencida de que los tiempos de crisis no son la mejor época para que los partidos mayoritarios muestren su perfil más radical, ese que tanto asusta a los votantes moderados, decisivos en unas elecciones generales. Con esa tesis en la cabeza, Mariano Rajoy se esforzó ayer en lanzar un mensaje de prudencia a sus huestes, enfervorizadas por el enorme poder territorial que han acumulado tras los últimos comicios. Además, Rajoy pretende vender «concordia» y sacar rédito a la supuesta «radicalización» del discurso que al PSOE ha impuesto su candidato, Alfredo Pérez Rubalcaba, y que según los cálculos del líder de los populares solo servirá para asustar a los mercados y no convencerá a los que se dicen indignados. «Los socialistas pretenden presentarse ahora como salvadores de aquellos a los que han perjudicado», llegó a decir ayer Rajoy ante su comité ejecutivo, en una reunión que tuvo lugar a puerta cerrada.

Para los populares, la intervención que Rubalcaba hizo el sábado en su acto de proclamación rezuma «radicalización y demagogia» e intenta convertir en soluciones aquellas propuestas que, en los últimos siete años, han sido rechazadas por el equipo gubernamental de José Luis Rodríguez Zapatero, del que Rubalcaba formaba parte hasta ayer mismo.

PARCHES EN EJECUTIVO / De igual forma, el PP cree que los cambios acometidos en el Ejecutivo -José Blanco será a partir de ahora su portavoz y Antonio Camacho, ministro de Interior- ponen en evidencia que los socialistas ya no tienen «nada nuevo que ofrecer» salvo «parches» y «radicalidad», según las palabras que utilizó la número dos del partido, María Dolores de Cospedal, en la rueda de prensa que ofreció para resumir las conclusiones del comité ejecutivo popular. «Todo esto son parches y los españoles ya no quieren más parches, sino que lo que quieren y necesitan es un Gobierno nuevo para salir de la crisis», enfatizó Cospedal.

A continuación, recalcó que reformas que Zapatero consideraba cruciales como la del mercado laboral, las pensiones o la negociación colectiva ya se han hecho y, por tanto, insistió en su petición de adelanto electoral para que los conservadores puedan poner en práctica un mandato «reformista». «Lo único que justifica ya que el Gobierno hoy siga en pie es exclusivamente un interés partidista», sentenció. Cospedal aclaró que el PP dio la orden ayer a la jefa de campaña, Ana Mato, y al responsable de programa electoral, Baudilio Tomé, para que tengan la maquinaria del partido preparada para un posible adelanto electoral. Según la también presidenta de Castilla-La Mancha, los populares van a presentar medidas «ilusionantes» que saquen a España de la crisis.