El PSC y CiU pugnan por 'regalar' becas y trabajo a jóvenes en paro

¿Qué es mejor para un joven que ni estudia ni trabaja: una beca o crédito para formarse o bien un contrato para aprender un oficio aunque sea sin sueldo? Los socialistas son partidarios de la primera opción y, conscientes de las críticas que ha recibido su promesa de becas para la generación ni-ni, ayer matizaron que serán ayudas que, en caso de no aprovecharse, deberán devolverse. CiU, por su parte, ofrece un contrato, inicialmente sin remuneración, pensado para que los jóvenes que ahora no hacen nada consigan entrar en el mercado laboral.

Al final, de lo que se trata es de afrontar uno de los retos derivados de la crisis. Económica, pero también de valores, puesto que está en juego el futuro de una generación, o al menos el de una parte. «Nosotros no nos resignamos, hay que evitar que sea una generación perdida», defendió ayer laconsellerade Justícia y número dos de la candidatura socialista, Montserrat Tura. El PSC subrayó que la promesa que lanzó el sábado su candidato, José Montilla, y cuyo coste aún no se ha cuantificado, incluye dos posibilidades. La primera, para los menores de 25 años, es una beca de nueve meses de duración dirigida a aquellos que han abandonado los estudios. La segunda, para los menores de 30 años, está pensada para que los beneficiarios dispongan de un sueldo mientras perfeccionan su formación.

PRIMER PASO: APRENDIZ / El coordinador del programa de CiU, Carles Agustí, destacó que el objetivo del contrato de aprendizaje es conseguir que el joven entre en el mercado laboral. «Otra opción -añadió- es ofrecer un contrato estable a tiempo parcial». Menos Esquerra, el resto de los partidos descalificaron la propuesta de Montilla. La federación nacionalista insistió en que la promesa recuerda los famosos 400 euros de José Luis Rodríguez Zapatero, pensados para aumentar el consumo, y reprochó a los socialistas que quieran gastarse un dinero que, en opinión de CiU, no tienen dado el precario estado de las arcas de la Generalitat.

Sin que sirva de precedente, el argumento esgrimido por Iniciativa fue bastante parecido. ¿Cómo se puede invertir ese dinero sin tocar los impuestos?, se preguntan los ecosocialistas. «Me parecen bien todas las políticas sociales que se hagan. Pero lo que tienen que decir los candidatos es cómo las piensan financiar. Nosotros creemos que necesitamos una política fiscal todavía más progresiva», destacó el candidato de ICV-EUiA, Joan Herrera.

También el PP se sumó a las críticas. Según su candidata, Alicia Sánchez-Camacho, Montilla promete ahora ayudas después de haber dejado a Catalunya «arruinada».