Más de la mitad de los catalanes prefieren a Mas como 'president'

El Barómetro Político de Catalunya le da hoy a Artur Mas más de un motivo para sonreír. Además de constatar el nítido ascenso de las expectativas electorales de CiU, el sondeo del GESOP revela que el candidato convergente se consolida con claridad como el presidente de la Generalitat preferido por los catalanes. Y no solo eso: Mas logra, además, su mejor puntuación de los últimos dos años. Las buenas noticias para el líder nacionalista contrastan con las sombras que la encuesta proyecta sobre el actual jefe del Govern, José Montilla, que no logra sumar ni una sola décima a la calificación que obtuvo en el barómetro de hace tres meses y continúa a las puertas del aprobado. Pero en el otro lado.

Ningún elemento del sondeo refleja tan claramente el cada vez más desigual pulso que mantienen Mas y Montilla como el apartado que plantea directamente a cuál de los dos candidatos –dejando a un lado al resto de los aspirantes– prefieren los catalanes como presidente. El resultado es concluyente. Por primera vez, más de la mitad de los encuestados se decantan por el líder de CiU. En el caso de que las elecciones catalanas fueran un cara a cara, el 52,3% de los votantes apoyarían a Mas, y solo el 34,3% elegirían a Montilla para un segundo mandato.

LOS VOTANTES DE ERC, CON MAS / La cuestión cobra un interés adicional si se analiza el recuerdo de voto de quienes responden a la pregunta. El electorado convergente mantiene las posiciones con una firmeza encomiable. El 91,7% de los catalanes que en el 2006 depositaron en la urna la papeleta de la federación nacionalista prefieren a Mas como inquilino del Palau de la Generalitat. Los votantes socialistas se muestran, en cambio, más veleidosos: el 28,6% admiten que el líder nacionalista les convence ahora más como president que el candidato al que votaron hace cuatro años, y solo el 63,3% renuevan su apuesta por Montilla.

Entre los votantes de los otros dos partidos que componen el Govern tripartito y que dan sostén, por tanto, a la presidencia de Montilla, destaca la opinión de quienes respaldaron a ERC en las anteriores elecciones autonómicas: solo el 30,8% dice preferir al líder del PSC, mientras que el 48,1% elige a Mas.

LAS NOTAS / El cuadro de calificaciones de los principales líderes políticos catalanes también avala la supremacía de la federación nacionalista. De hecho, solo hay dos dirigentes que superan el aprobado: el democristiano Josep Antoni Duran Lleida, que con una nota media de 6,3 vuelve a encabezar la clasificación, y el convergente Artur Mas, que recibe un 5,6, la mejor puntuación que ha obtenido en los dos últimos años; no es una nota que satisfaría a unos padres exigentes, pero en un contexto general de desafección y desconfianza hacia la actividad política, resulta bastante aceptable.

Inmediatamente detrás de ellos se sitúa el president Montilla. Un 4,9 le otorgan los catalanes. Exactamente la misma nota que obtuvo hace tres meses, cuando cruzó la raya del suspenso después de dos años y medio de aprobados holgados.

En el seno del tripartito, el particular pulso entre aliados que desde hace un tiempo mantienen ERC e ICV-EUiA tiene su reflejo en la igualdad en las calificaciones de sus líderes respectivos, Joan Puigcercós y Joan Herrera, valorados ambos con un 4,6. Los candidatos de los otros dos partidos parlamentarios quedan a considerable distancia. Albert Rivera, de Ciutadans, obtiene un 3,1, una décima más que Alícia Sánchez- Camacho, del PP, cuya nota, un 3,0, es la más baja de todas las que le ha otorgado el barómetro desde que lidera a los populares catalanes.

Las puntuaciones de Rivera y Sánchez-Camacho son en esta ocasión peores incluso que la del candidato del partido xenófobo Plataforma per Catalunya, Josep Anglada (3,3). Otros dos dirigentes que no han confirmado aún si concurrirán o no a las elecciones salen mejor parados: Joan Laporta (cuyo índice de notoriedad solo es superado por Montilla y Mas) obtiene un 3,6, y Joan Carretero (Reagrupament), un 4,3.