El PCE condena el crecimiento basado en "el ladrillo y la corrupción"

El comité federal del Partido Comunista de España (PCE), socio principal de Izquierda Unida, criticó ayer el actual modelo económico de crecimiento "especulativo" en el país, basado "en el ladrillo y la corrupción".

Así lo manifestó Francisco Frutos, secretario general del PCE, en la reunión del máximo órgano del partido, que debatió la situación económica y política, y en la que dijo que el crecimiento económico de España "se basa en la especulación derivada del fuerte peso del sector de la construcción y de los procesos de privatización en el sector público".

Frutos señaló que esta política "va en la línea de más mercado y menos Estado, más selva social y menos derechos, menos democracia y más autoritarismo de las finanzas y la especulación", según informa el PCE en un comunicado. En opinión de Frutos, este modelo del "neoliberalismo no crea ningún valor económico y social, está orientado al beneficio y no a las personas, y es incapaz de abordar y dar una solución civilizada a los problemas sociales, ecológicos y políticos del mundo actual", por lo que "está fracasado como opción humana".

En el informe que presentó al Comité Federal, Frutos criticó las declaraciones de recién elegido presidente de la CEOE, Gerardo Díaz, en las que pedía menos intervencionismo y la desaparición de los servicios públicos, y las calificó de "fundamentalismo neoliberal sin complejos".

PRECARIEDAD LABORAL

El presidente del comité federal, Felipe Alcaraz, apuntó que la pujanza del "sector del ladrillo" hace que la vivienda "se convierta en un negocio, y no en un derecho constitucional". Alcaraz denunció la precariedad laboral, que, según precisó, alcanza el 33% frente al 12% de la media europea, y la siniestralidad laboral.

También criticó la "explotación de una amplia franja de inmigrantes" porque "sólo uno de cada tres se afilia a la Seguridad Social y cobran un 30% menos que el salario de convenio".