Opinión | El pataleo
Josep Pedrerol

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Periodista

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Lamine no se toca

Los contratiempos, en el fútbol y en la vida, ayudan a madurar, a crecer. Sacará conclusiones positivas de todo esto

España, "la mejor selección del mundo", sabe perder y presume "de poder ganar a cualquiera"

Lamine Yamal pasa cabizbajo ante el trofeo de la Nations League, tra quedar la selección española en segundo lugar

Lamine Yamal pasa cabizbajo ante el trofeo de la Nations League, tra quedar la selección española en segundo lugar / Martin Meissner / AP

Están cansados, desafortunados, fuera del partido... pero no les quites. El seleccionador De la Fuente protagonizó otro ataque de entrenador. Un clásico. Vio que Lamine no bajaba a defender un par de veces, entre ellas en el segundo gol de Portugal, y reaccionó a lo bruto. Fuera Lamine Yamal. El mismo futbolista que tres días antes había dado una exhibición que dejó alucinados a los franceses. Fue una decisión que acabó por mandarnos a casa sin la Nations League. Vaya chasco. Nos creíamos invencibles, intratables, superiores a cualquiera. Qué razón tenía Zubimendi al final del partido. "Es un aviso, estamos mal acostumbrados. Yo el primero, que desde que llegué a la selección solo nos han pasado cosas positivas.” Cierto. Estos chavales no sabían lo que era perder. Desconocían el significado de una derrota importante, de esas que duelen a jugadores y aficionados. Esa sensación de ser invulnerables era positiva porque les hacía ser valientes, atrevidos y hasta descarados. Ahora, en cambio, ya saben lo que significa darse de bruces con la realidad. Vendrá bien para el Mundial.

Me fastidia por Morata, que vuelve a ser carne de memes, de risas y señalamientos por ese penalti fallado. Una pena. Pero me fastidia, sobre todo, por Lamine Yamal. Aunque seguramente esta derrota le servirá para el futuro. Se repite hasta la saciedad cuando se sale en los partidos y también es bueno recordarlo cuando no aparece, como ocurrió ante Portugal: aún tiene 17 años. Los contratiempos, en el fútbol y en la vida, ayudan a madurar, a crecer. Sacará conclusiones positivas de todo esto. Seguro. Pero también es cierto que se le complica el Balón de Oro. Acaba la temporada sin ningún título europeo, y eso pasa factura. Más aún el hecho de no estar presente en el mundial de clubes, la competición en la que medio mundo pondrá los ojos durante todo un mes. ¿De la Fuente, por qué le quitaste? Un momento de inspiración, un regate, un pase medido, cualquier toque de magia del chaval podía habernos dado el título. No olvidemos la importante lección que nos ha dejado esta final: a los buenos, en los partidos importantes, no se les quita.