EL PERIÓDICO, con los colegios profesionales

Hay redes sociales que existen desde muchos siglos antes que los inventos de Zuckerberg. Las personas generamos vínculos más allá de la familia. Algunos son territoriales, otros son ideológicos, durante siglos lo fueron también religiosos, ahora lo son muy intensamente deportivos. Unos de los vínculos más antiguos son los profesionales. Los gremios son aún en las ciudades una red social robusta que teje consensos y complicidades a la vez que organiza a la sociedad civil frente a las administraciones. La versión moderna de los gremios son los colegios profesionales. Los más veteranos son los que gestionan oficios que exigen acreditación para su ejercicio como es el caso de los abogados, médicos, arquitectos, enfermeras, ingenieros etc. Pero la utilidad social de estas redes ha hecho que otros muchos colectivos hayan creado sus propios colegios. En Catalunya hay más de 100 que conectan a 200.000 profesionales. Son mucho más representativos de la ciudadanía que ciertos perfiles de X a los que los políticos y sus asesores les prestan mucha atención.

Hace unos meses, con el presidente de la Associació Intercol·legial de Col·legis Professionals, el decano de los abogados Jesús Sánchez, tuvimos un sueño: crear una tribuna para dar visibilidad al punto de vista de los profesionales sobre temas de actualidad. Y el sueño se hará realidad este jueves en Casa Seat donde, de manera interdisciplinar, abordaremos el tema de la salud mental y emocional. No podíamos elegir mejor asunto.

La Intercol·legial y EL PERIODICO no dejamos de ser nodos de redes sociales y fortalecer este tipo de vínculos, darles visibilidad y potenciar su labor es una manera más efectiva de combatir los excesos de las redes digitales que hacer fatuas contra unos u otros. Lo digital tiene sentido cuando amplifica, potencia o fortalece lo presencial. O cuando rompe los límites del espacio y del tiempo. Y no tiene sentido cuando solo es fruto de la artificialidad. 

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