Artículo de Sergi Sol

La culpa es del maldito corredor mediterráneo

Ahora resulta que es el corredor el culpable de los despropósitos en la red de cercanías de Barcelona

rodalies

rodalies / Toni Garriga (Efe)

Sergi Sol

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La R4 de Renfe, de Sant Vicenç de Calders a Manresa, raro es que dé un día de tregua. Los sufridos usuarios padecen retrasos y congestiones tan a menudo que lo que brilla por su ausencia es una rebelión en masa por el hastío. Parece que estemos mayormente en un estado de hipnosis estoica. Y se aguanta todo rechistando lo justo. Claro que por lo menos es gratis. Ahí estuvo listo Sánchez.

Estos días suena por los megáfonos una nueva cantinela para justificar los retrasos. Ahora es culpa del corredor mediterráneo. Sí, ese corredor que ha unido incluso a los empresarios valencianos con los catalanes que desean una buena vía de comunicación para exportar sus productos. Ese corredor que parece la Sagrada Família, solo que de esta son apreciables los avances y la ciudad de Barcelona saca un jugo extraordinario.

El corredor sigue sin ser una realidad y mucho menos se ha hecho visible en Catalunya, tanto que a menudo parece una de las mayores tomaduras de pelo y una consecuencia directa de esa España radial que hicieron suya tanto Felipe como Aznar. Cabe recordar que la alta velocidad europea empezó de Madrid a Sevilla, menuda paradoja. Por lo menos en esta ocasión se podría haber planteado de Tarragona a los Pirineos.

Pues bien, ahora resulta que es el corredor mediterráneo el culpable del despropósito en la red de cercanías que cruza una de las regiones más pobladas no ya de la provincia, sino de la Península.

Hay quien reprocha a Rufián que no aprovechara la negociación de los Presupuestos en las Cortes para reclamar inversiones, lo que resulta realmente hilarante. Primero, porque lo de las inversiones en Rodalies llevamos 15 años oyéndolo como una matraca. ‘Lluvia de millones’ llegaron a titular antaño. Igual se fueron por la alcantarilla. Pero la pregunta que cae como una losa es si el deber y la responsabilidad de mejorar Rodalies es de Rufián y los indepes. Sería inaudito que no fuera el Gobierno de turno quien velara de oficio por ello. O que no fuera con el resto de diputados catalanes no 'indepes' que hay en el Congreso. Incluida la ministra Raquel Sánchez, exalcaldesa de Gavà. Porque eso nos llevaría a conclusiones fulminantes.

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