Artículo de Agnès Marquès

Un tren a Madrid

Renfe ha tenido que ajustarse a la realidad y según el ministerio de Transportes la entrada de la competencia ha reducido hasta un 43% el precio de los billetes de AVE entre Barcelona y Madrid

Trenes de ouigo y de renfe

Trenes de ouigo y de renfe / José Luis Roca

Agnès Marquès

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Escribo el artículo en las preciadas dos horas y media de trayecto ferroviario que unen Madrid y Barcelona. ¡Cómo me gusta viajar en tren! Vuelvo a casa después de confirmar que realmente es Navidad: en Madrid hace el frío que corresponde, la gente se viste de fiesta y la decoración de las calles y de los comercios tiene un envidiable buen gusto. Madrid está preciosa y punto.

El trayecto de ida lo hice con un tren de la compañía Iryo, la vuelta, con Ouigo, son las compañías que desde este año cubren en alta velocidad el trayecto Barcelona-Madrid y que dan cuenta de la dimensión de la tomadura de pelo del monopolio del que ha disfrutado Renfe con la conexión en AVE entre las dos ciudades durante quince años. Sí, nos han tomado el pelo.

Mejores precios (mucho mejores), más frecuencias, asientos más confortables, servicio de bar ambulante…y el encanto propio del que llega tarde a la fiesta sabiendo que tiene algo bueno que ofrecer. Renfe ha tenido que ajustarse a esa nueva realidad y según cifras del ministerio de Transportes la entrada de esta nueva competencia ha reducido hasta un 43% el precio de los billetes de AVE entre Barcelona y Madrid en el último trimestre del año respecto al mismo periodo de 2019. Ojo, casi un 43%. ¡Casi nada!

Sin embargo, para escribir el artículo he tenido que tomarme más tiempo del esperado. Necesitaba conexión a internet para verificar estos datos, y en ese asunto las tres compañías en competencia (añadan AVLO, la 'low cost' de Renfe) naufragan por igual. Debe haber una especie de abismo inescrutable, un enorme agujero negro insalvable para la conexión móvil porque no hay manera, como si los confines de los Monegros se expandieran sutilmente. Ninguna de las tres compañías consigue cubrir el trayecto con una buena cobertura de teléfono móvil. La conexión wifi que ofrecen tambien sufre largas y continuas interrupciones, como en el AVE. Y aunque parte del encanto de ir en tren es divagar mirando por la ventana, este artículo tiene que ser enviado a tiempo. Consigo suficiente conexión antes de llegar a Tarragona.

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