Apunte

Pollo al pil-pil

Los jugadores españoles esperando lo peor en la tanda de penaltis contra Marruecos.

Los jugadores españoles esperando lo peor en la tanda de penaltis contra Marruecos. / EFE/EPA/Tolga Bozoglu

Sergi Mas

Sergi Mas

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La perspectiva es la siguiente: se ganó una Eurocopa y un Mundial de forma incontestable en 2008 y 2010 gracias a una calidad estratosférica que atesoraban aquellos futbolistas que dirigieron Luis Aragonés y Vicente Del Bosque. Fue impresionante. 

¿Pero solo fue por la calidad? No. También se debió a la casualidad, que condujo a que futbolistas coetáneos formasen la base de aquel combinado que generó una ilusión innegable. Piqué, Ramos, Iniesta, Villa, Casillas, Xavi Hernández, Fernando Torres, Puyol, Capdevila, Xabi Alonso, Pedro, Jesús Navas, etc… ¿De verdad queremos comparar aquella selección con cualquier otra anterior o posterior?  Es que me desorino.  

¿En serio queremos comparar aquella defensa con la que ha disputado este Mundial? ¿Estamos tontos, o qué? ¿Hablamos de aquel centro del campo? ¿Comparamos aquella delantera con la de… Aquí me detengo, porque se ha acabado el Mundial y no tengo claro la delantera que hemos llevado.

Por eso mismo me refiero a una calidad prémium y de casualidad; fue raro que nacieran todos más o menos en años seguidos. Pero fue. Y también casualidad que los entrenadores de los clubs donde jugaban los pusieran como titulares. Por tanto, punto pelota y se acaba el debate. Haced el favor de no comparar aquel equipo con el que ha disputado este mundial, por favor, que el actual está en la galaxia de Ganímedes, haciendo compañía a Carlos Jesús. 

Desde aquellos dos títulos tenemos alguno que la toca y nos pensamos que somos aspirantes al título europeo o mundial. Así, alegremente. Días previos al campeonato leímos lecturas tan optimistas que otorgaban a la selección acabar entre los cuatro primeros. De nuevo voy al fondo a la derecha al baño

Hasta que la genética, la calidad y la casualidad reúna otra generación de futbolistas similares no volveremos a oler un campeonato. Y mientras, siempre acaba habiendo mal rollo con el seleccionador de turno, se llame Kubala, Luis Suárez, Miera, Clemente, Camacho, Luis Aragonés, Vicente Del Bosque, Lopetegui, Hierro, Robert Moreno y Luis Enrique. Siempre. Y a Luis Enrique siempre le ha gustado el pollo.

Suscríbete para seguir leyendo