Felipe X y la podredumbre

"Y si lo denuncias serás denunciado, por calumniador". Así rezaba una estrofa de un temazo de La Polla Records. Y a ciencia cierta que así fue en no pocos casos. Fermín Muguruza, líder de Negu Gorriak, fue denunciado por el general de la Guardia Civil, Rodríguez Galindo, al mando cuando secuestraron, torturaron salvajemente y asesinaron a Lasa y Zabala.

Fermín fue condenado por la Audiencia Provincial por vulnerar el honor del general de la Guardia Civil, con base en Intxaurrondo, en otro temazo: ‘Podredumbre’. La letra señalaba que a cuenta de la lucha antiterrorista -con la llamada Guerra Sucia- también se flirteó desvergonzadamente con el narcotráfico. Como en los tiempos del socialista Roldán, otro perla que hasta se llegó a lucrar con los fondos destinados a los huérfanos de la Guardia Civil. O de esos Amedo y Domínguez que -entre asesinato y asesinato- se pateaban ingentes cantidades de dinero en el Casino de San Sebastián. ¡Qué vidorra!

Esa denuncia del general condenado a 70 años por terrorismo no es una anécdota sin más. Como no lo es que Barrionuevo fuera indultado por petición unánime de la Sala del Supremo que lo condenó.

Lo cierto es que durante años se amenazó con llevar ante los tribunales a cualquiera que acusara al Gobierno de Felipe González de estar detrás del GAL.

Esa es una de las derivadas de ese debate ético sobre si el fin justificaba los medios, que es la tesis de fondo para los que justificaban los asesinatos de los GAL ni que fuera con la boca pequeña.

Pero más allá de ese debate, estuvo la 'omertá' para proteger a los mandos policiales y políticos que formaron los GAL. Y ese pacto de silencio y encubrimiento reunió grandes consensos. Como también todos los desmanes de la Corona protagonizados por el Emérito.

También CiU rechazó que el Congreso investigara a los GAL de Felipe X. ¡Incluso el PNV de Arzalluz! También estos mismos impidieron en la Mesa del Congreso que prosperaran las preguntas del aguerrido Joan Tardà cuando pretendía acabar con la opacidad de los gastos de Su Majestad el Rey. Ese fue el caldo de cultivo de un descontrol que fue a más y más como luego hemos sabido. Solo empezamos a saber cuando ya fue imposible seguir ocultando las fechorías.

Lo bueno de la reciente entrevista a Barrionuevo es que admite sin tapujos que él manejaba los GAL y que hay que darle las gracias por haber liberado a Segundo Marey tras nueve días. Porque oye, también le hubieran podido pegar un tiro en la sien tras darse cuenta que se equivocaron de tipo. Suerte que Marey no pasó por manos del cabo Bayo y este no le arrancó las uñas con alicates como a los jóvenes de 19 años Lasa y Zabala.

40 años después del nacimiento de los GAL, la X sigue disfrutando de la vida a sus ochenta años. Como el Emérito. Todos de rositas. Ni uno rinde cuentas por tantos millones regalados por Monarcas teocráticos, ni a otro renuncian a un baño de masas para celebrar los 40 años del logro de los 202 diputados. Y 39 de ese detalle menor, los secuestros, torturas, asesinatos y derroche de los patriotas del GAL.

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