Artículo de Josep Prieto Blázquez

Escenarios de aprendizaje en formación dual en la FP y en la universidad

Las empresas deberían invertir en la creación de estructuras o departamentos para dar apoyo a los centros educativos

Una clase de formación profesional dual

Una clase de formación profesional dual

Josep Prieto Blázquez

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El informe Innovating Pedagogy 2022, liderado por la Open University y en el que participamos activamente desde la UOC, destaca avances en pedagogía y enseñanza a escala mundial. Una de las 10 tendencias escogidas este año ha sido la siguiente: escenarios de aprendizaje en formación dual en la FP y en la universidad.

Hay una larga experiencia, sobre todo en países como en Alemania, de formación dual donde el estudiantado aprende en una combinación de aprendizaje en el aula y capacitación práctica en la industria.

Una de las claves del éxito de la formación dual es la sincronización entre el aprendizaje en el aula y las prácticas profesionales en la empresa. Es decir, llevar la realidad profesional al aula y la comprensión teórica que sustenta la práctica en el lugar real de trabajo.

Históricamente, no ha sido así. El estudiantado ha aprendido en dos entornos sin demasiada relación, en términos de aprendizaje y competencias profesionales, entre el centro escolar y la empresa.

Por un lado, las empresas que participan en la formación dual en ocasiones critican la enseñanza que se realiza en el aula porque no ofrece una alineación suficiente con las prácticas profesionales esperadas en la industria. Por ejemplo, las empresas piden competencias profesionales relacionadas con la resolución de problemas y la adquisición de habilidades del trabajo por proyectos colaborativos, reuniendo equipos de personas de distintos dominios de conocimiento, competencias y habilidades. En cambio, la enseñanza en el aula se ha centrado tradicionalmente en el aprendizaje individual, organizado por asignaturas. También piden que los docentes actualicen sus conocimientos sobre procesos de producción, procedimientos de trabajo y técnicas y tecnologías utilizadas en las empresas para complementar los contenidos teóricos explicados en el instituto o la universidad. Esta actualización es responsabilidad de la administración educativa competente.

Pero por otra parte, desde el punto de vista de los centros educativos, las empresas no destinan tiempo y recursos suficientes para proponer actividades prácticas reales en las aulas. Las empresas deberían invertir en la creación de estructuras o departamentos para dar apoyo a los institutos de FP, universidades y otros centros educativos.

Para alinearnos a las necesidades de la industria, los estudios de FP de Jesuïtes Educació-UOC han cambiado su modelo de enseñanza y han modificado su plan de estudios. La estructura del estudio por competencias basado en módulos convencionales ha pasado a un modelo basado en “aprender para saber hacer” a partir del desarrollo de proyectos individuales o grupales. Los proyectos realizados abordan problemas o retos reales de la industria. Por ejemplo, analizar y gestionar la mercancía en el almacén de una empresa real, con datos reales de existencias, devoluciones y costes. Y muy importante, se tienen en cuenta las recomendaciones de las empresas a la hora de definir sus proyectos.