ACTUALIDAD AZULGRANA

La frenética calculadora azulgrana

Laporta da la bienvenida a Lewandowski.

Laporta da la bienvenida a Lewandowski. / FCB

Albert Guasch

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El Barça en ruinas sigue repartiendo alegrías económicas por Europa. A Leeds United y Bayern de Múnich les ha tocado una Euromillones. ¿Robert Lewandowski, a sus 34 años, es caro por 45 más 5 en variables? Ya se sabe que solo nos acordaremos del precio si el tipo no mete goles, pero tan justos son los elogios por su calidad como dudar de la operación por la edad.  

¿Es Raphinha caro, un extremo que acaba de despuntar en un equipo de la Premier fregando el descenso, por 58 más 9 en variables? Tiene pinta de que sí, el precio es de estrella consolidada, pero de nuevo, el rendimiento dictará sentencia. 

Esa misma pregunta nos la hicimos la temporada pasada con Ferran Torres, cuyo coste se elevó a los 55 millones más 10. Habrá que darle otra temporada al valenciano, claro, aunque la respuesta con más votos ahora sería que sí, que el City nos la jugó bien jugada, menudo dineral. De momento, le han puesto a Ferran, los mismos que le ficharon, dos tapones en su posición preferida, la de extremo derecho: el mentado Raphinha y el repescado Dembélé. Fácil no lo tendrá para justificar aquel desembolso. 

A por los 200 millones

Ya avisó Joan Laporta que el Barça planeaba invertir unos 200 millones de euros en este mercado. Y en ello está, en bajada y a toda velocidad. Aún no está anunciada la segunda y ya empezamos a hablar de la tercera palanca, que ya se sabe que es dinero que se recibe a cuenta de ganancias futuras. Hay prisa por armar un equipo ganador.  

Paciencia, recomendó hace unas semanas Pep Guardiola. «Hay momentos en la historia, todo el mundo debe aceptarlo, en que la situación es la que es y a veces ir con perfil bajo ayudará a subir muy rápido», dijo. No pocos socios asintieron. Laporta no fue uno de ellos. La ambición y la alegría por bandera. Nos conocemos de memoria los jugadores fichados y los que se quieren fichar. Una avalancha de incorporaciones para que Xavi disponga de una plantilla competitiva de inmediato y no se pueda quejar.

Ahora bien, todas estas nuevas caras no pueden jugar aún con el Barça porque el límite salarial ahoga. Ni uno de los nuevos ha sido inscrito aún. Y el club no tiene otra vía para ampliar el ‘fair play’ financiero que aumentar los ingresos a gran escala, ya sea vendiendo una porción de las ganancias del Museo o la gestión de Barça Studios, una vez selladas (o casi) la cesión del 25% de los derechos de televisión de la Liga.

Vaciar la masa salarial -la vía lógica- está costando. Ni los marginados de la gira ni los presionados a irse, léase Frenkie de Jong, quieren salir. Así que el departamento de control económico de LaLiga sospecha que cualquier día el FC Barcelona se presentará con unos tomos de números frescos y a ver a cuántos fichajes podrá inscribir de golpe para empezar el campeonato, el 12 de agosto. 

Y si alguno queda pendiente, pues habrá que inventar, diferir sueldos por ejemplo, al estilo de lo que sucedió el curso pasado con Memphis primero o Agüero después. Quizá irá bien que algún fichaje se lesione durante un ratito. Quizá es al propio Lewandowski al que se pide que se baje un poco el sueldo. Y así todo el rato, con la calculadora a mano y a estar pendiente hasta el último minuto.

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