ASAMBLEA CON PRÓRROGA

El 'soci', un vecino demasiado quisquilloso

Joan Laporta saluda a José Elías de Audax Energía.

Joan Laporta saluda a José Elías de Audax Energía. / FC Barcelona

Emilio Pérez de Rozas

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Ya pasó cuando hablábamos del poder que tenía Leo Messi en el Barça. Aquel que el Tata Martino sufrió en sus propias carnes cuando le dijo “sé que usted, si quiere, haría que mañana me despidiesen pero, por favor, no me lo demuestre cada día”. Y ya pasó que Messi no paró de negarlo, día tras día.

Ahora está ocurriendo con los millonarios avalistas de Joan Laporta, que niegan tener poder en las decisiones del club, pero no cesan de aparecer en los medios de comunicación sugiriendo derramas para salvar al Barça y/o pedir aportaciones a los socios para fichar, en enero, a Erling Haaland.

A mí, la verdad, si fuese socio del Barça (ya no digo compromisario escrupuloso, sensato, riguroso, bien informado), me mosquearía bastante que Eduard Romeu, Jaume Roures y, más recientemente, José Elías, dueño de Audax Renovables, digan lo que hay que hacer, lo que está bien y mal, lo que va a ocurrir.

El último en hablar ha sido Elías, el señor de los cielos, el dueño de helicópteros y Lamborghini, en una entrevista en la SER, en ‘Que t’hi jugues’, que si no han tenido oportunidad de escuchar (lo digo porque sería de obligado cumplimiento para los 4.457 compromisarios que deben acudir a la prórroga de la asamblea frustrada), harían bien en buscarla en Internet y oírla porque es deliciosa, negando que manden pero diciendo “los proyectos que vamos a hacer”.

Asamblea de vecinos

Elías y su socio Romeu avalaron a Laporta con casi 40 millones de euros y, si hace faltan más, los pondrán. Y Elías no solo cree que los que tienen que mandar y tomar las decisiones son su socio Romeu (“un mago de las financias y por eso lleva las mías”), Ferran Reverter (“un tío muy alemán”) y Álex Barbany, nuevo director de Ingresos del ‘més que un club’, sino que, en referencia al caos y cachondeo del pasado domingo en la asamblea, a la que solo acudieron el 16% de los convocados (es decir, el 0,4% de los socios que tiene el Barça), sentenció: “No lo dirá ningún directivo, pero el Barça no se puede gestionar como una comunidad de propietarios, de vecinos. El niño se ha hecho grande”.

No sé si eso suena a futura SAD, no sé si eso significa que los ricos avaladores tienen poder pero, desde luego, suena a restar importancia y protagonismo al ‘soci’. Eso, desde un helicóptero, suena aún más fuerte.

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