Rey emérito

Xavier Sardà

Periodista

Xavier Sardà

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

¡Viva Juan Carlos!

Lo de que usted cobraba un porcentaje por cada barril de petróleo que España le compraba a Arabia, que se lo pregunten a Colón de Carvajal. Usted no sabía nada

08/04/2012 El Rey Juan Carlos, en una imagen de archivo.MADRID, 5 (CHANCE) Mucho se ha hablado del abandono de España del Rey Juan Carlos durante los últimos dos días, pero todavía quedan muchas incógnitas por responder acerca de esta histórica decisión que ya está marcando la historia de nuestro país. De momento, sabemos que el monarca ha asegurado a sus cercanos que no se trata de un exilio ni mucho menos de una huída definitiva, sino algo temporal. El emérito no se ve fuera de España, que es donde se siente más a gusto, y sus planes pasarían por volver cuando el ruído mediático y la indignación por sus últimos escándalos financieros hubiesen cesado.POLITICA EUROPA ESPAÑA SOCIEDAD

08/04/2012 El Rey Juan Carlos, en una imagen de archivo.MADRID, 5 (CHANCE) Mucho se ha hablado del abandono de España del Rey Juan Carlos durante los últimos dos días, pero todavía quedan muchas incógnitas por responder acerca de esta histórica decisión que ya está marcando la historia de nuestro país. De momento, sabemos que el monarca ha asegurado a sus cercanos que no se trata de un exilio ni mucho menos de una huída definitiva, sino algo temporal. El emérito no se ve fuera de España, que es donde se siente más a gusto, y sus planes pasarían por volver cuando el ruído mediático y la indignación por sus últimos escándalos financieros hubiesen cesado.POLITICA EUROPA ESPAÑA SOCIEDAD / EUROPA PRESS

Carta de un monárquico a Juan Carlos.

Señor:

Cuando se producen catástrofes y mortandades, no dejamos de creer en Dios. Del mismo cuando usted, Señor, se ha visto envuelto en ciertas maledicencias, yo no dejo de venerarle. Pésimo el monárquico que a la primera de cambio desatienda sus más profundas lealtades. 

Corinna es guapa y con ideas muy claras sobre lo que quiere, Señor. Le alabo el gusto. Las cuentas en Suiza solo pueden indignar a los que no han viajado. Además, las abrió su abogado, no usted. Su primo, Álvaro de Orleans, puede que sí estuviese enterado. Usted, Señor, es simplemente un beneficiario indirecto. Naderías.

La bella Corinna era consejera de Lukoil y usted, Señor, le pide al grisáceo Zapatero que los eficaces rusos controlen Repsol. Le dicen que no. Patriotas de pacotilla. Naderías.

Al final, Corinna le demanda por difamación y acoso. Corinna la loca, vamos. Le ha costado un cierto dinero hacer frente al juicio, Señor. Naderías.

Ahora está usted en Abu Dabi, rodeado de amigos que le han brindado cientos de millones. Se muestra en estas donaciones la fraterna hermandad entre las distintas monarquías. Naderías.

Lo de que usted cobraba un porcentaje por cada barril de petróleo que España le compraba a Arabia, que se lo pregunten a Colón de Carvajal. Usted no sabía nada. Tampoco le constaba a usted el dinero de Javier de la Rosa de Kuwait. Naderías.

Mire si tenía la conciencia tranquila que cuando el general Sabino Fernández Campo, jefe de la Casa Real, le dijo que lo que usted hacia no era correcto, lo relevó.

Fíjese si tiene amistades valiosas que, entre empresarios y amigos, le han prestado 4.395.000 euros para regularizar su situación con los vampiros de Hacienda. Eso que ya había pagado 687.000 euros. Su herencia es tan absurdamente discutida que ni su hijo la quiere. 

Por cierto, la Casa Real europea que esté libre de pecado, que tire la primera piedra. Y lo de que usted ha favorecido al irredento independentismo por desapego, que baje La Moreneta y lo vea.

Suscríbete para seguir leyendo