Pros y contras

La paja ajena

Deprimidos por la pandemia y asfixiados por el calor, la irritabilidad anda disparada. Relajémonos un poco

Silvia Casorran, consejera del distrito de Sant Martí

Silvia Casorran, consejera del distrito de Sant Martí / EL PERIÓDICO

Emma Riverola

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La consejera de movilidad del Ayuntamiento de Barcelona, Sílvia Casorrán, hizo una publicación en su cuenta privada de Instagram que ha levantado cierto revuelo (¿y qué no lo hace?). La regidora posaba sobre una bala de paja y anunciaba, con evidente ironía, que había visitado la "Catalunya profunda" para "hacer un estudio de mercado sobre productos innovadores para sustituir los famosos bloques de hormigón" que invaden las calles de Barcelona. "Los he probado en todas las posiciones, hasta saltando, ¡son comodísimos!" 

La publicación fue compartida y criticada con la exaltación propia del mundo virtual. Reconozco que, en un primer momento, más que evaluar el postureo me preocupé por los insectos que podía acoger tanta paja. Una vez superada la aprensión entomológica me zambullí en las críticas. La cosa transitaba entre las mofas, los insultos y la exigencia de dimisión. ¿La publicación de Casorrán era digna de provocar tanta bilis? Se le acusaba de burla al mundo rural, cuando no era más que una broma. Tontuna o no, pero una simple broma. Deprimidos por la pandemia y asfixiados por el calor, la irritabilidad anda disparada. Relajémonos un poco. Y revisemos la paja propia.

Suscríbete para seguir leyendo