La nota

El éxito de Ayuso

Membres del PP entre els quals el seu lider  Pablo Casado  aplaudeixen la candidata a les eleccions madrilenyes  Isabel Diaz Ayuso  a la seu del carrer Genova durant l escrutini  el 4 de maig de 2021 (horitzontal) Roberto Cardenas   PP ACN

Membres del PP entre els quals el seu lider Pablo Casado aplaudeixen la candidata a les eleccions madrilenyes Isabel Diaz Ayuso a la seu del carrer Genova durant l escrutini el 4 de maig de 2021 (horitzontal) Roberto Cardenas PP ACN / Roberto Cardenas PP

Joan Tapia

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Los análisis de urgencias nunca son completos, pero lo que es seguro es que el PP e Isabel Díaz Ayuso han tenido una gran victoria. El PP, con 65 diputados, va a más que doblar los 30 de hace dos años. Y tiene más que la suma de los tres partidos de la izquierda por lo que no dependerá de Vox y podrá gobernar sin comprometerse con la extrema derecha.

¿Cuáles son las razones? La primera es que al doblar diputados se ha comido los 26 que tenía Cs, que ha desaparecido. Pero todavía ha aumentado más. Por el incremento de la participación o por un cierto trasvase del voto socialista moderado.

La segunda razón es que a Ayuso -quizás por suerte- le ha salido bien su gestión de la pandemia. Es posible que en Madrid haya habido relativamente más defunciones que en otras comunidades autónomas, pero ello no lo ha notado, o no lo ha castigado, el electorado. Al decir que las vacunas debían darse primero a los taxistas y a los camareros, Ayuso apuntó bien a que la prioridad a la economía podía beneficiar a capas más allá de los sectores acomodados.

Una tercera causa es que las desgracias (coronavirus o crisis de 2008) sancionan a los gobiernos. Incluso la CDU alemana de Merkel está superada por los Verdes en las encuestas. Y Sánchez, al enfrentarse a Ayuso en la campaña, ha podido favorecer esa tendencia.

Un Gobierno socialista nunca es popular en amplios sectores de clases profesionales. Y un gobierno PSOE- Podemos puede haber causado irritación. Y más cuando Iglesias -candidato en Madrid- no ha sido conciliador. Aquí la cruzada de Ayuso contra el aumento de los impuestos ha sido eficaz. Y la imagen de Venezuela no ha ayudado. Ni a Podemos ni al PSOE que ha gobernado con Iglesias.

Finalmente, la mala campaña del PSOE. En Madrid desde hace muchos años gobierna la derecha y polarizar la campaña ha ahuyentado a bastantes electores, incluso socialistas. Gabilondo, que ganó muy bien hace dos años, ha sido ahora un desastre. Su campaña ha sido errática y al final ha seguido -retirada del debate de la SER como muestra- la corriente marcada por Iglesias.

¿Consecuencias sobre la política española? Es un error decir que el PP es el futuro como lo fue afirmar que el PP estaba sentenciado tras sus pésimos resultados en Catalunya en febrero. Lo que está claro es que dar la impresión de que se gobierna solo para la izquierda moviliza mucho a la derecha.

Veremos qué pasa entre la tentación ayusista y el PP más centrista. Pero Casado sale de esta elección con dos triunfos. Uno, Vox no baja, pero no crece. Otro, Cs queda muy tocado. Si en España se repite lo de Madrid la división del voto de centro-derecha en tres partidos habrá dado un paso atrás y ello le beneficia. Rivera se equivocó mucho tras las elecciones del 2019 pero Inés Arrimadas no ha reflotado la nave.

Pedro Sánchez y el PSOE han tenido una muy severa derrota. En una comunidad que vota a la derecha desde hace muchos años, pero con bastante menos margen que ayer. El aviso es claro. No pueden salir desde el Consejo de Ministros discursos que parecen indicar que se gobierna solo para la izquierda y que enervan a media España. Los discursos del 'todo a la izquierda' acaban movilizando a la derecha. Y no precisamente a sus políticos más inclinados al centro sino a los más trumpistas.

El estilo de Isabel Díaz Ayuso no gusta a muchos ciudadanos -y menos en Catalunya- pero ayer tuvo una gran victoria. Y el PSOE de Pedro Sánchez, su noche más amarga desde su exitosa moción de censura en 2018. Tiene que arremangarse.

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